¿Por qué no tomar el té con indigentes y vivir con extraños?

 Por Víctor Gaspar
(@gaspar_victor)
Distrito Federal, 25/07/13, (N22).– “Vivimos durante dos semanas en la casa de un extraño y en esas dos
semanas tratamos de adaptarnos a esa familia en particular. Comes, duermes con
ellos, vas a la iglesia con ellos y vas a funerales o bodas”, comentó la directora de escena, Adelheid
Rosen.
En su infancia, Adelheid Rosen solía invitar a indigentes y vagabundos a
tomar el té a su casa. Su madre se inquietaba con la presencia de las amistades
de su hija. Esto marcó la vida profesional de Adelheid quien años después
desarrolló una metodología teatral llamada «Wijksafari», fundada en la adopción
de actores por parte de una familia.

La experiencia de los ocho actores también se extiende a los espectadores
quienes visitan en moto las diferentes locaciones.

“Visitas lugares que son importantes para los vecinos de esas ocho casas. Por
ejemplo, vistas una mezquita, una iglesia copta o una capilla o vas a una
escuela islámica donde van los niños de la comunidad o al supermercado donde
hacen las compras diarias”.

Adelheid Rosen se encuentra en México impartiendo un taller a jóvenes
estudiantes de teatro. El curso es resultado de su cooperación con el actor
mexicano Daniel Jiménez Cacho y está auspiciado por la embajada de Holanda en México.
El modelo se replicará con familias de Tepito que adoptaran por unos días a los
actores. Pese a su connotación social, el método, asegura Rosen, surgió de una
motivación diferente.

“Quería saber lo que significa no rechazar nada de la vida, quise adentrarme
más en la vida, quise ser la vida misma y experimentar como podía convertirme
en esa vida”, concluyó.

Para mayores informes, puede consultarse el sitio www.femaleeconomy.nl
Imagen:http://bit.ly/2db8NMj
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