- «Los planes de estudio no exigen que el niño tenga un pensamiento crítico, que aprenda a analizar e investigar»
Por Alizbeth Mercado (@alizbeat)
CIUDAD DE MÉXICO, México, 08/04/13, (N22).- “El problema es que cada niño tiene un criterio diferente, esto hace mucho más complejo el proceso de enseñanza. Nos han acostumbrado a que ‘tú no vienes a la escuela a pensar, a la escuela vienes a aprender’. Los planes de estudio no exigen que el niño tenga un pensamiento crítico, que aprenda a analizar e investigar. Es la parte central de nuestra propuesta, si los niños tuvieran un pensamiento crítico y reflexivo estaríamos en otro lado. Lamentablemente lo planes de estudio y los maestros en pocas ocasiones incentivan este pensamiento crítico”, declaró Jaime Salinas Fleitman, coautor del libro Tu hijo en el centro.
En tiempos de Reforma Educativa y resistencias por parte de algunos docentes; además de la crisis educativa –como la llaman los hermanos Salinas Fleitman-, surge la investigación Tu Hijo en el centro. Moisés Salinas ha sido académico en distintas universidades de Estados Unidos y cuenta con diversas publicaciones en las que examina la resolución de conflictos; asimismo es especialista en psicología de la educación. Jaime Fleitman es director de la Organización ORT de México y creador del Congreso Internacional de Innovación Educativa.
La investigación tiene por objeto “explicar la educación centrada en el estudiante, de ahí el título del libro, él es el punto central en la cadena de aprendizaje. El alumno generará su propio conocimiento y explicamos qué sucede con los modelos educativos, en donde el maestro tiene un papel más preponderante. El texto habla de estos modelos anticuados y hablamos de ¿por qué el estudiante debería estar en el centro?”
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Para los hermanos, las deficiencias en el modelo educativo viene del método “modelo de fábrica”. Este sistema consiste en que a todos los estudiantes se les educaban de la misma forma, “el salón de clase era una fábrica donde todos debían tener las mismas habilidades”.
Desde la era industrial se capacitó a todos de la misma manera independientemente de las habilidades: «La realidad del mundo cambia, ya no estamos en esa era donde se generaban miles de empleados que tuviera la mismas capacidades ahora se requiere que cada persona tenga capacidades diferentes que tiene que ver con las peculiaridades de cada estudiante», añadió Salinas.
Reconocer las habilidades de cada niño y trabajar con estas particularidades, no sólo es una tarea para los profesores. Por una parte, se necesita capacitar a los maestros, “el maestro tiene que dejar de creer que es el centro del conocimiento, es un moderador y facilitador. Es un problema complejo, las escuelas deben estar dispuestas, el gobierno y la SEP ofrece programas de estudio muy anticuado. Entonces es un proceso, no estamos haciendo una propuesta de la noche a la mañana, pero si no comenzamos a tomar cartas en el asunto no veremos resultados”.
Asimismo, los papás se tienen que involucrar más, pueden buscar educación extramuros, motivar a sus hijos a buscar que les gusta, no imponer, clases, lectura, que lea lo que le gusta. Los padres de familia no tenían injerencia en lo que sucedía en las escuelas, pero el panorama se ha abierto, es muy importante que se quiera involucrar y o pensar que los encargados de educar al hijos son las escuelas, abundó.
La era digital abre un nuevo paradigma para que los niños investiguen y utilicen herramientas que complementen o agilicen su educación, sin embargo muchos maestros siente miedo porque no saben cómo utilizarlas y por lo tanto tampoco sabrán cómo enseñar, en opinión de Jaime.
“El maestro tiene miedo que el alumno sabe mejor que él manejar los dispositivos, si no sabe buscar en internet, no sabe imprimir, se siente en desventaja y el mismo profesor crea una resistencia a incorporar los elementos digitales. Volvemos al tema de la capacitación como tema central y entender ¿cuáles son las ventajas reales que ofrece la computadora?, no es nada más proyectar, es entender para qué sirve”.
En cuanto a la Reforma Educativa, para Jaime se trata de una reforma política y afecta la forma de cómo los maestros trabajan y son evaluados, no es una reforma de contenidos. Es un primer gran paso, espero que terminemos adoptándola y sea el primer paso sobre una reforma dirigida a los estudiantes. Porque esta reforma se dirige a los maestros y los sindicatos, también necesaria, pero si nos quedamos ahí no se logrará nada. El siguiente paso debería ser en cuanto a los contenidos, sino las metodologías y capacitación que se requiere para poder enseñar de acuerdo a las necesidades del siglo XXI.
Tu hijo en el centro es una edición de la editorial Debate. El prólogo del título fue escrito por Ricardo Raphael.
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