«Palabras, mapas, secretos y otras cosas», coordenadas para llegar a Isabel Coixet

Netflix recientemente agregó a su catálogo este retrato íntimo de la cineasta española donde desde la mirada de sus amigos, colegas e Isabel misma se construye un retrato íntimo de ella y de las protagonistas de sus cintas

Ciudad de México (N22/Ana León).- Quizás citar las últimas palabras que dice Coixet en este documental dirigido por Elena Trapé, es lo peor que se puede hacer para invitar a alguien a ver una cinta, pero son estas palabras en las que ella revela mucho de sí misma:  «Esto es una montaña rusa», dice, «y mientras pueda seguir en el parque de atracciones, mientras pueda seguir haciendo películas, contando historias y haciendo que las historias hagan que la gente tenga también un diálogo con ellos mismos, pues ya me vale. Si hay que montarse en la montaña rusa, pues nos montamos y chillamos.» 

La cina documental se va construyendo a través de los lugares donde filmó veinte años atrás Cosas que nunca te dije (1996), donde vemos a unas jovencísimas Lili Taylor y Leslie Mann. Son las locaciones de esta cinta: una casa, una lavandería, una tienda que ofrece excéntricos vestuarios –veinte años atrás no era ése su giro–, el clima lluvioso y frío, implacable de Saint Helens en Portland, Oregon (EEUU), las que detonan la memoria de la cineasta que va recordando anécdotas, de aquellos días filmando esta, su primera película. 

Este documental muy al estilo de las road movies, que inicia en Los Ángeles, nos lleva por Portland y nos traslada luego a Nueva York. En cada ciudad, Isabel se encuentra con una amiga, o amigo, intercambian memorias, detalles de lo que en aquellos días, los de las películas que se enuncian y cómo su amistad se construyó a partir de éstas.

Algo que detallan varios de sus amigos entrevistados, es su sentido del humor, cualidad que no es muy visible en pantalla, pero que está muy presente en su vida privada y que marca la convivencia con sus cercanos. Un humor, dicen, bastante refinado, preciso, negro.

Artistas, productores, directores, periodistas, fotógrafos, su propia pareja, un abogado especialista en Derechos Humanos, hablan sobre la cineasta y van revelando poco a poco mucho de aquello que ella no revela de sí misma. 

Julia Solomonoff, directora de cine y amiga, atina a compartir una reflexión sobre el lenguaje en las cintas de Isabel. ¿Por qué está más cómoda en el inglés que en el español? Para algunos ha sido catalogado como un gesto esnob, para Solomonff, la decisión de Coixet, y esa es una conclusión personal, responde más a que «hay algo casi tan íntimo en la escritura de Isabel que necesita del velo de otro idioma, de otro decorado, de otro lugar, para poder revelarse.»

Este acercamiento de Elena Trapé revela algo de lo mucho que es esta cineasta. Y que nos invita a sumergirnos en su filmografía.