Ciudad de México, México, 27/07/12, (N22).- El “Pie de atleta” se sitúa entre las 20 enfermedades de la piel más comunes en México; además, el 10 por ciento de la población entre la adolescencia y los 40 años de edad acuden a consulta por este motivo, destacó la doctora Rosa María Ponce Olvera, dermatóloga certificada por la Sociedad Mexicana de Dermatología, A. C.
Clínicamente se le conoce como Tiña de los pies y corresponde a una infección por hongos en dicha zona. Es más frecuente en personas que utilizan el calzado todo el día y que no tienen oportunidad de ventilarse. Por otro lado, quienes padecen exceso de sudoración en la región están predispuestos de significativamente.
Los jóvenes que usan tenis de manera continua o los deportistas, son un ejemplo del tipo de población con mayor incidencia, así como quienes comparten baños con deficiente higiene y no utilizan sandalias para entrar a la ducha en hoteles, clubes, balnearios o hasta en el mismo hogar. También, no dedicar el tiempo suficiente para el secado de los pies entre los dedos después del aseo diario puede favorecer la aparición del trastorno.
La experta destacó que entre las novedades médicas para evitar este tipo de padecimientos cutáneos se encuentra el uso de la toxina botulínica tipo A; el cual es un tratamiento probado desde 1998 para algunos casos de sudoración excesiva o Hiperhidrosis.
“Dado que uno de los factores que puede predisponer la aparición de hongos en los pies es la sudoración excesiva, el tratamiento preventivo consiste en aplicar Toxina en cada una de las plantas de los pies, la cual inicia su acción dentro de las primeras 48 horas y el efecto máximo se instala en una semana. Durante 6 meses en promedio elimina el sudor excesivo, por lo que si el sujeto presenta continuamente “Pie de Atleta” secundario a Hiperhidrosis, sería un remedio excelente” explicó la doctora.
Por su parte, dentro del grupo de los tratamientos para combatir el problema ya instalado en la piel es el uso de pomadas, geles o sprays con función antimicótica. Para casos más severos se prefiere que el medicamento sea prescrito en tabletas.
La dermatóloga sugiere que a los primeros síntomas como mal olor o resequedad extrema en los pies, los pacientes acudan al dermatólogo para recibir un diagnóstico oportuno. De la misma manera, se advierte sobre los riesgos de recurrir a remedios caseros o naturales ya que pueden ser contraproducentes o irritar aún más la dermis.
Las recomendaciones para evitar este padecimiento son:
1) Secar perfectamente los pies después del baño y colocar siempre calcetines, calcetas o medias para evitar el contacto directo del calzado con el pie.
2) Tener una toalla secante independiente para la zona de pies y no utilizar la misma para el secado del cuerpo en general.
3) Aplicar periódica de desinfectantes en la tina de baño o piso de la regadera, por ejemplo solución de cloro.
4) Evitar el intercambio de calzado con otras personas.
5) Cambiar periódicamente de calzado y en medida de lo posible mantener los pies libres de encierro o ventilados.
6) Disminuir el uso de zapatos ahulados sintéticos como los tenis por periodos prolongados de tiempo.
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