«Para enfrentar la pandemia y sus consecuencias, necesitamos al menos del 10% del PIB Mundial», señaló el secretario general de las Naciones Unidas
Ciudad de México (N22/Redacción).- António Guterres, secretario general de las Naciones Unidas desde enero de 2017, ha convocado a las economías más importantes del planeta agrupadas en el G-20, a participar en el Fondo Monetario Internacional para las perspectivas de crecimiento económico para el período 2020-2021, ya que para muchos especialistas la recesión económica derivada de la pandemia por COVID-19 será peor que la de 2009, incluso algunos consideran que será muy parecida a la que hubo al final de la Segunda Guerra Mundial.
En conferencia de prensa virtual, Guterres aseguró que: «Las sociedades están en crisis y las economías están en picada […] Debemos responder de manera decisiva, innovadora y conjunta para reprimir la propagación del virus y abordar la devastación socioeconómica que el COVID-19 está causando en todas las regiones. La magnitud de la respuesta debe coincidir con la escala de la crisis: a gran escala, coordinada e integral, con respuestas nacionales e internacionales guiadas por la Organización Mundial de la Salud. Y debe ser multilateral, con países que muestren solidaridad con las comunidades y naciones más vulnerables. El mensaje del informe que publicamos hoy es claro: responsabilidad compartida y solidaridad global en respuesta a los impactos de COVID-19.»
El secretario general de las Naciones Unidas dijo que debemos estar unidos para enfrentar al virus y sus consecuencias, donde la respuesta médica coordinada debería poner fin a la pandemia. Esta respuesta universal debería de reflejarse también en el tratamiento de la enfermedad y la distribución de la vacuna cuando ésta esté lista y la enfermedad no reaparezca en los lugares donde ya fue superada.
Guterres también se mostró preocupado por la situación de África, e invitó al G-20 para que avanzara con una iniciativa en favor de ese continente como fue propuesto en la pasada cumbre. También subrayó que no debemos dejar de atender a los sectores sociales que son más afectados en esta crisis: mujeres, personas mayores, jóvenes, trabajadores de bajos salarios, pequeñas y medianas empresas, el sector informal y grupos vulnerables, especialmente aquellos en entornos humanitarios y de conflicto.
Para ello, invitó a diseñar políticas fiscales y monetarias que permitan el respaldo a estos sectores, en apoyar en la ampliación de la seguridad social y en proteger a las empresas de quiebras masivas. Aseguró que para enfrentar este panorama es necesario, al menos, el equivalente al 10% de PIB mundial.
También aseguró Guterres que las Naciones Unidas ya han establecido un nuevo Fondo Fiduciario de socios múltiples para la Respuesta y Recuperación de COVID19, que permita apoyar a los países de ingresos bajos y medianos, para que puedan recuperarse de este choque socioeconómico que ha provocado la emergencia.
Al finalizar, el secretario de Naciones Unidas dijo que después de esta crisis que superaremos, tendremos dos opciones:
«Podemos regresar al mundo como era antes o enfrentar de manera decisiva aquellos problemas que nos hacen innecesariamente vulnerables a las crisis. La recuperación de la crisis de COVID-19 debe conducir a una economía diferente, enfocada en construir economías y sociedades más equitativas, inclusivas y sostenibles que sean más resistentes frente a las pandemias, el cambio climático y los muchos otros desafíos globales que enfrentamos […] Este es el mayor reto que enfrentamos en el mundo desde la Segunda Guerra Mundial.»