Se reconoció que su obra «incide en algunos de los aspectos que dibujan un presente convulso y desconcertante, desde una perspectiva de raíz feminista»
Ciudad de México (N22/Redacción).- Aclamada autora de novelas y ensayos como La mujer que mira a los hombres que miran a las mujeres, Siri Hustvedt fue reconocida este miércoles con el premio Princesa de Asturias de las Letras 2019. El jurado ha destacado su perspectiva feminista y su preocupación por las cuestiones fundamentales de la época contemporánea.
De padres noruegos, pero nacida en Minessota, Hustvedt es una de las plumas más reconocidas de las letras estadounidenses; aunque inició escribiendo poesía, son la novela y el ensayo su terreno de acción. Ha sido traducida a más de treinta idiomas.
El jurado y director de la RAE, Santiago Muñoz Machado, leyó el acata a la medianoche en Oviedo y ha destacado que la obra de Hustvedt es «una de las más ambiciosas del panorama actual de las letras» e «incide en algunos de los aspectos que dibujan un presente convulso y desconcertante, desde una perspectiva de raíz feminista». Además, se añadió que, tanto en la ficción como en el ensayo, Hustvedt aborda los temas «como una intelectual preocupada por las cuestiones fundamentales de la ética contemporánea», de forma que su obra contribuye «al diálogo interdisciplinar entre las humanidades y las ciencias».
Estudió Historia y Lengua y literatura inglesa. En 1983 publicó sus primeros poemas en Leer para ti, y su primera novela nueve años más tarde, Los ojos vendados. Luego vinieron otras historias de ficción como El hechizo de Lily Dahl (1996), Todo cuanto amé (2002) y Elegía para un americano (2008), una obra de raíz autobiográfica que supuso su consagración como escritora.
Entre sus novelas están también: El verano sin hombres (2011), El mundo deslumbrante (2014) y Recuerdos del futuro (2019), su último título hasta la fecha.
Hustvedt ha destacado como ensayista. Ahí están Vivir, pensar, mirar (2012) o La mujer que mira a los hombres que miran a las mujeres (2016), una de las referencias intelectuales del feminismo reciente. También se ha interesado mucho por el mundo de la pintura, y ha llegado a impartir charlas sobre este tema en el Museo del Prado y en el Metropolitan Museum of Art de Nueva York.