Fandiño, danza generosa y perfecta*

Bailarín y coreógrafo, fue un referente en la danza mexicana del siglo XX; murió este fin de semana a los 90 años

Redacción/Ciudad de México

Este fin de semana se dio a conocer la muerte de Luis Fandiño, bailarín y coreógrafo, uno de los referentes de la danza contemporánea mexicana del siglo XX. Fandiño murió el sábado pasado a los noventa años de edad luego de una cirugía de columna.

Nacido en 1931, Fandiño encontró en cintas de Gene Kelly y en el bailarín mexicano José Limón, una fuente de inspiración poderosa que lo llevó a elegir la danza como profesión, pero también como una forma de estar en el mundo.

Fue discípulo de Antonio de la Torre, Guillermo Keys Arenas, Guillermo Arriaga, Rocío Sagaón y Bodil Genkel, entre otros, pero sobre todo recibió gran influencia del bailarín Xavier Francis. 

Formó parte de la Academia de la Danza Mexicana (1951-1953), dirigida en ese momento por Miguel Covarrubias, en pleno apogeo de la época de oro de la Danza Nacionalista Mexicana.   

No sólo fue bailarín, coreógrafo, administrador, director y maestro de danza contemporánea, sino que también desarrolló el “Método Fandiño” para la formación de bailarines profesionales. Un método que permite el desarrollo de una técnica que favorece las características propias de cada individuo: una formación personal para cada cuerpo y a su propio estilo en la manera de expresarse como ser creativo. Un método que se adjudica el derecho de ser rebelde, participativo, creativo y humano. Un método que no se convierte en una dictadura sobre el cuerpo.

Fue también miembro fundador de la compañía Nuevo Teatro de Danza (1953-1963), dirigida por Xavier Francis, donde incursionó en la docencia y participa activamente de todas las actividades de la compañía. Luego se integró como primer bailarín del Ballet Nacional de México (1964-1975), dirigido por la maestra Guillermina Bravo. En 1978 se integró a la compañía Alternativa, Ballet Contemporáneo como docente, asumiendo la dirección desde 1980 a 1989. 

Como docente formó parte de la compañía Barro Rojo, Arte Escénico; el Sistema Nacional para la Enseñanza Profesional de la Danza, y en la Escuela Nacional de Danza Clásica y Contemporánea, principalmente. 

Recibió el Premio José Limón en 1993; Festival Internacional de Danza Contemporánea Lila López; Medalla a la Excelencia Académica del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura; así como la publicación del libro Luis Fandiño, Danza generosa y perfecta*, de Margarita Tortajada (2000), entre otros.  

El Festival Internacional de Danza Contemporánea de la Ciudad de México, dirigido por Rodrigo González y Raúl Tamez, otorga desde 2017 la Medalla Luis Fandiño a personalidades reconocidas dentro de la Danza Contemporánea en México. 

En 2019, Luis Fandiño participó en el Coloquio Guillermina Bravo, organizado por el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura y la Universidad Autónoma Metropolitana.