- Para mí contar historias siempre estuvo ahí. No
recuerdo un momento en mi vida en que haya dicho «ahora voy a ser
escritora». Cuando yo era chiquita y no sabía escribir, contaba historias,
lo hacía de manera oral.
recuerdo un momento en mi vida en que haya dicho «ahora voy a ser
escritora». Cuando yo era chiquita y no sabía escribir, contaba historias,
lo hacía de manera oral.
Por Irma Gallo
“Si bien es un libro que tiene mucha oscuridad y mucha
tensión, también busca cierta luz. O sea las casas están vacías porque los
personajes han salido de esos espacios de confort que a veces pueden ser las
casas, esos espacios de rigidez y han salido a buscar soluciones en otro lugar,
entonces también hay cierta esperanza”, comentó Samanta Schweblin, escritora.
En
estas Siete casas vacías se construyen historias de mujeres que han perdido a
un hijo pequeño y no soportan ver el chocolate en polvo que solía tomar, de
hombres que recogen la ropa de otro hijo muerto en el jardín de los vecinos, de
otras mujeres que buscan, en las casas ajenas, más allá del lujo y de la
comodidad, algo que no han podido encontrar en la suya. Son los relatos que
construye la argentina Samanta Schweblin en el libro publicado por Páginas de
espuma y que ganó el Premio Internacional de Narrativa Ribera del Duero 2015.
estas Siete casas vacías se construyen historias de mujeres que han perdido a
un hijo pequeño y no soportan ver el chocolate en polvo que solía tomar, de
hombres que recogen la ropa de otro hijo muerto en el jardín de los vecinos, de
otras mujeres que buscan, en las casas ajenas, más allá del lujo y de la
comodidad, algo que no han podido encontrar en la suya. Son los relatos que
construye la argentina Samanta Schweblin en el libro publicado por Páginas de
espuma y que ganó el Premio Internacional de Narrativa Ribera del Duero 2015.
“Me gusta mucho el relato, primero porque me enamoré
de la literatura leyendo la tradición argentina que escribe ese tipo de relatos
fántasticos rioplatenses, como Bioy Casares, Silvino Campos, y es un género que
además leo mucho, como lectora me gusta mucho”.
de la literatura leyendo la tradición argentina que escribe ese tipo de relatos
fántasticos rioplatenses, como Bioy Casares, Silvino Campos, y es un género que
además leo mucho, como lectora me gusta mucho”.
Esta posibilidad de poder adentrarme en la oscuridad
en los miedos que uno tiene, en todas las preguntas existenciales que a veces
uno se hace; poder atravesar situaciones que te dan cierta información a cambio
y volver al mundo real casi ileso, ¿no? conluyó.
en los miedos que uno tiene, en todas las preguntas existenciales que a veces
uno se hace; poder atravesar situaciones que te dan cierta información a cambio
y volver al mundo real casi ileso, ¿no? conluyó.
Samanta
Schweblin participó en una conversación con Nuria Barrios y Malcolm Otero
Barral el sábado 24 de octubre, en la Casa Refugio Citláltepetl como
parte de las actividades del Hay Festival Ciudad de México.
Schweblin participó en una conversación con Nuria Barrios y Malcolm Otero
Barral el sábado 24 de octubre, en la Casa Refugio Citláltepetl como
parte de las actividades del Hay Festival Ciudad de México.
Imagen:http://bit.ly/1GElFWZ
15AM