- Esta recopilación incluye una introducción a cargo del escritor y poeta Eduardo Langagne, quien destacó la habilidad cuentística del tampiqueño y la gran facilidad con la que se ha adaptado a cada generación.
Por
Alberto Cruz
Alberto Cruz
Distrito Federal, 28/07/15, (N22).- De
entonces y ahora (FCE, 2014) del tampiqueño Orlando Ortiz
(1945) reúne 25 cuentos que abordan diversas temáticas; versan de cosas
estrictamente cotidianas hasta problemas excepcionales, únicos y sociales. Los
personajes que protagonizan cada relato fueron delimitados con características propias
que los transforman en vivas imágenes para el lector.
entonces y ahora (FCE, 2014) del tampiqueño Orlando Ortiz
(1945) reúne 25 cuentos que abordan diversas temáticas; versan de cosas
estrictamente cotidianas hasta problemas excepcionales, únicos y sociales. Los
personajes que protagonizan cada relato fueron delimitados con características propias
que los transforman en vivas imágenes para el lector.
Con una narrativa
aparentemente sencilla, Ortiz lleva de la mano al lector para que vaya
descifrando un desenlace inesperado e incluso a medias, una vuelta a la página
también es una vuelta a la trama del cuento. Esta recopilación incluye una
introducción a cargo del escritor y poeta Eduardo Langagne, quien destacó la
habilidad cuentística del tampiqueño y la gran facilidad con la que se ha
adaptado a cada generación.
aparentemente sencilla, Ortiz lleva de la mano al lector para que vaya
descifrando un desenlace inesperado e incluso a medias, una vuelta a la página
también es una vuelta a la trama del cuento. Esta recopilación incluye una
introducción a cargo del escritor y poeta Eduardo Langagne, quien destacó la
habilidad cuentística del tampiqueño y la gran facilidad con la que se ha
adaptado a cada generación.
Así como el lector acompaña
a los personajes desde que son presentados hasta que culmina la narración, también
se detallan los escenarios, son los que forman la atmósfera que develará lo que
podría venir, lo que podría pasar; son un anticipo del giro de 180 grados que
puede dar la historia.
a los personajes desde que son presentados hasta que culmina la narración, también
se detallan los escenarios, son los que forman la atmósfera que develará lo que
podría venir, lo que podría pasar; son un anticipo del giro de 180 grados que
puede dar la historia.
Para tener un buen cuento se
debe tener una buena historia con una gran narración. Ortiz nos ofrece 25
cuentos con situaciones cotidianamente inusitadas, en una narrativa ininterrumpida
que atrapará al lector en la búsqueda del sentido, donde las palabras se unen ya
sea para hablar de un par de hombres a la espera de dos invitadas, del
envenenamiento de todo un equipo de béisbol o de un padre en plena amenaza de
muerte con su hijo presente.
debe tener una buena historia con una gran narración. Ortiz nos ofrece 25
cuentos con situaciones cotidianamente inusitadas, en una narrativa ininterrumpida
que atrapará al lector en la búsqueda del sentido, donde las palabras se unen ya
sea para hablar de un par de hombres a la espera de dos invitadas, del
envenenamiento de todo un equipo de béisbol o de un padre en plena amenaza de
muerte con su hijo presente.
De
entonces y ahora ofrece a que el lector despierte su
curiosidad, sea intuitivo, se convierta en un testigo presente de cada
historia, pero sobre todo, que se deje sorprender.
entonces y ahora ofrece a que el lector despierte su
curiosidad, sea intuitivo, se convierta en un testigo presente de cada
historia, pero sobre todo, que se deje sorprender.
Imagen:http://bit.ly/1D9BR0w
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