- Al anunciarle este galardón, el compositor afirmó que de alguna manera los compositores tienen algo que decir y contribuir a la cultura en nuestro país
Por Irma Gallo
Ciudad de México, México, 22/04/15, (N22).- «Es especialmente halagador que se la otorguen a un
compositor, porque eso de alguna manera a mí me indica, o quiero pensar que al
reconocerme a mí como compositor también se reconoce el trabajo de otros
compositores», expresó Javier Álvarez.
compositor, porque eso de alguna manera a mí me indica, o quiero pensar que al
reconocerme a mí como compositor también se reconoce el trabajo de otros
compositores», expresó Javier Álvarez.
Premio Nacional de Ciencias y Artes, discípulo de
Mario Lavista y compositor del soundtrack de Cronos, película de Guillermo del
Toro, Javier Álvarez recibirá la Medalla Bellas Artes por su trayectoria
artística.
Mario Lavista y compositor del soundtrack de Cronos, película de Guillermo del
Toro, Javier Álvarez recibirá la Medalla Bellas Artes por su trayectoria
artística.
Al anunciarle este galardón, el compositor afirmó que de alguna manera los compositores tienen algo que decir y contribuir a la cultura en nuestro país.
Una manera singular de iniciarse en la música
«Siempre supe que yo era músico, no lo tuve
claramente delineado en mi mente pero de todas maneras, ahora que lo examino,
desde niño tuve una inclinación, siempre me fascinó el sonido».
claramente delineado en mi mente pero de todas maneras, ahora que lo examino,
desde niño tuve una inclinación, siempre me fascinó el sonido».
El padre de Álvarez era arquitecto y entre otras obsesiones tenía trabajaba el sistema hidráulico. «Abriendo una llave, una y otra, y otra, podía, de
alguna manera, como en una especie de experimento pitagórico, podía uno poner a
la casa en movimiento, hacerla vibrar. Y esa es una de las experiencias que
recuerdo como niño, de las más tempranas. Nunca pensé, en ese momento, que eso
me llevaría a la música».
alguna manera, como en una especie de experimento pitagórico, podía uno poner a
la casa en movimiento, hacerla vibrar. Y esa es una de las experiencias que
recuerdo como niño, de las más tempranas. Nunca pensé, en ese momento, que eso
me llevaría a la música».
La emoción más grande
Dentro de las emociones que ha recibido en su vida, Javier Álvarez recordó que una orquesta de cuerdas iba a tocar una
obra suya, que se llama Metro Chabacano.
obra suya, que se llama Metro Chabacano.
«Cuando llegué al ensayo me
sorprendió que no había ni sillas ni atriles. Y dije: ‘bueno, ¿qué va a
pasar?’. Pues lo que pasó fue algo extraordinario: llegaron los miembros
de la orquesta que eran puras mujeres, se pararon en posición, llegó la
directora, que también se paró enfrente de ellas, y sin ningún solo papel, paradas,
empezaron a tocar mi obra. Y la tocaron con tal perfección, con tal
expresividad, que no pude hacer otra cosa porque se me salieron las lágrimas.», finalizó.
sorprendió que no había ni sillas ni atriles. Y dije: ‘bueno, ¿qué va a
pasar?’. Pues lo que pasó fue algo extraordinario: llegaron los miembros
de la orquesta que eran puras mujeres, se pararon en posición, llegó la
directora, que también se paró enfrente de ellas, y sin ningún solo papel, paradas,
empezaron a tocar mi obra. Y la tocaron con tal perfección, con tal
expresividad, que no pude hacer otra cosa porque se me salieron las lágrimas.», finalizó.
Imagen: http://bit.ly/1JdhvF3
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