Redacción/CDMX
Según el nuevo estudio de la Universidad de Flinders, Australia, algunas mujeres con pechos grandes tienden a hacer ejercicio con menos frecuencia y evitan los deportes de alta intensidad, además de que creen ideal el reducir el tamaño de sus senos para mejorar su rendimiento.
Este estudio publicado en el International Journal of Reconstructive Surgery se basó en una encuesta con la participación de 2 mil mujeres involucradas en el programa de Parkrun en Australia, Inglaterra y Sudáfrica.
Con esto se concluyó que existe una participación mayor en ejercicios grupales después de una cirugía de reducción de senos.
56 mujeres del grupo encuestado, las cuales se habían sometido a una reducción mamaria anteriormente, informaron llevar un control de vida más saludable y activo.
Este estudio busca promover la importancia del ejercicio para el peso y la cardiopatía isquémica, de igual forma señala las barreras para los subsidios del gobierno australiano para la mamoplastia de reducción.
La doctora Claire Baxter, autora principal, explica que no solo es la necesidad deportiva, sino que las pacientes que buscan esta reducción de senos también lo hacen debido a la macromastia, dolores en la espalda y el cuello, los cuales algunos de los requisitos estatales para que se pueda llevar a cabo la reducción.
Otro de los análisis de este estudio fue la satisfacción con las tallas de las copas de brasier, mostrando que existe un mayor agrado por copas AA, A, B y C, en comparación de las más grandes como DD, E, F, G y H.
(Con información de Infosalus)