Ser amable puede cambiar nuestra salud

Redacción/CDMX

La amabilidad no solo es una virtud apreciada en la sociedad, sino que también tiene impactos positivos en nuestra salud física y mental, pues fortalece nuestro sistema inmunológico.

Investigaciones recientes revelan que la amabilidad no solo beneficia a quienes la reciben, sino que también puede mejorar la salud y el bienestar de quienes la practican.

La constante práctica de la amabilidad se ha asociado con un aumento en la felicidad y una reducción significativa de los síntomas de depresión y ansiedad.

Además, sorprendentemente, la amabilidad parece tener el poder de reducir la inflamación en nuestro sistema inmunológico.

Este efecto positivo en la salud mental y física puede ser atribuido a la activación de una zona específica del cerebro, conocida como cuerpo o núcleo estriado, que responde favorablemente a acciones gratificantes, similar a la respuesta ante placeres como a la comida.

La amabilidad también demuestra ser una herramienta eficaz para aliviar el dolor.

En estudios donde se administraron descargas eléctricas dolorosas a voluntarios mientras decidían donar dinero, aquellos que optaron por la generosidad experimentaron menos dolor.

Asimismo, se descubrió que donar sangre resultaba menos doloroso que extraer sangre para análisis, incluso cuando la aguja era el doble de gruesa.

En resumen, ser amable no solo trae beneficios a quienes son receptores de actos amables, sino que también mejora el estado de ánimo y la salud de aquellos que practican la amabilidad.

Por ello el portal BBC recomienda prepararle una bebida caliente a alguien cercano, ofrecer transporte a un vecino o realizar pequeños favores a compañeros, lo cual demuestra ser una forma tangible de incorporar la amabilidad en la vida cotidiana para cosechar beneficios a largo plazo para la salud.

(Con información de BBC.com)