Redacción/CDMX
Mujeres y niñas en Afganistán siguen sufriendo condiciones opresivas debido a una imposición política de “apartheid de género”, que es la discriminacion economica y social contra un sexo o género específico.
Debido a estas restricciones cada vez más intensas, impuestas a sus derechos y libertades, se les prohíbe a las mujeres desempeñar la mayoría de los trabajos y funciones públicas.
Bajo el gobierno talibán, Afganistán se ha convertido en el único país del mundo donde a las niñas se les prohíbe ir a la escuela después de los 11 años.
A pesar de ello, hay diferencias de opiniones dentro de los talibanes y muchos funcionarios que apoyan revertir la prohibición de escolarizar a las niñas en Afganistán, según el último ministro de educación del país Rangina Hamidi.
Estas fracturas internas de los talibanes en materia de educación de las niñas, podrían ser aprovechadas por los gobiernos mundiales para presionar con ellos para reabrir las escuelas de niñas, dijo Hamidi.
Hamidi ha propuesto apoyar soluciones locales de los afganos que están encontrando formas de eludir las prohibiciones de los talibanes, incluyendo el uso de espacios donde ya se les permite a las niñas estudiar, como es el caso de las madrasas, escuelas religiosas, pero que históricamente son espacios para el aprendizaje.
La ONU Niñas (Ungei) organizó una reunión feminista en Estambul, Turquía este mes, donde Hamidi habló, algunas mujeres afganas participantes criticaron cualquier propuesta para normalizar las relaciones con un grupo que continúa restringienro los derechos básicos de las mujeres.
(Con información de The Guardian)