Se cocina a fuego lento la carne cultivada

Redacción/CDMX

El aroma del pollo a la parrilla inundaba la cocina experimental del chef de investigación y Desarrollo de Believer Meats, Andres Voloschin.

Sin embargo, el rico olor provenía de tiras de pollo creadas a través de células madre.

Fueron científicos y no agricultores los que produjeron ese pollo, algo que empresarios, consumidores y expertos consideran que será una forma de producción de este alimento en el futuro.

Se estima que más de 150 empresas emprendedoras están tras el ambicioso objetivo de crear carne sin la necesidad de criar y matar animales, que sea barata y que sepa y se sienta como la carne que se come actualmente.

“Somos adictos a la carne como especie. Forma parte de nuestra evolución. Forma parte de nuestra cultura”, dijo Yaakov Nahmias, fundador de Believer, empresa de origen israelí.

Actualmente, el proceso de creación de esta carne es caro, y existen retos científicos como aprender a imitar la compleja estructura del bistec.

Otro obstáculo lo representan las regulaciones gubernamentales, solo Singapur y Estados Unidos permiten la venta de carne cultivada.

Una encuesta de The Associated Press Centro NORC para la Investigación de Asuntos Públicos encontró poco probable que la mitad de los adultos en EEUU la prueben.

La mayoría de los que dijeron que no lo harían declararon que “simplemente suena extraño”.

El proceso comienza con células, Dependiendo de la empresa, las células pueden provenir de un trozo de tejido, un óvulo fertilizado o un banco de células.

Es posible utilizar varios tipos. Los científicos eligen células que pueden autorrenovarse y convertirse en células musculares y células grasas que forman tejido cárnico.

A partir de células iniciales crean “líneas celulares”, de forma que no tengan que recurrir de nuevo a las de los animales.

Estas células se colocan dentro de recipientes de diversos tamaños llamados biorrectores y se bañan en un caldo rico en nutrientes, en el cual se multiplican.

Al carne gruesa y estructurada también requiere un andamio que ayude a las células a organizarse para tomar cierta forma.

Los cambios en la composición del caldo o medio, y ciertas señales promenientes del andamio, les indican a las células inmaduras que se conviertan en músculo, grasa o tejido conectivo.

Una vez que el biorreactor está lleno, la pasta de células se recolecta y se mezcla con proteínas vegetales, luego se presuriza y se expulsa para crear fibras de carne.

Los expertos dicen que pronto mucha gente probará la carne cultivada. Un informe reciente del Good Food Institute encontró que las inversiones en carne cultivada se triplicaron en promedio cada año de 2016 a 2022.

(Con información de Los Angeles Times)