Los alimentos ultraprocesados afectan a la salud y al medioambiente

Redacción/CDMX

Actualmente en cualquier parte podemos encontrar a los alimentos ultraprocesados (UPF), los cuales se popularizaron debido a que ofrecen el ahorro de tiempo en preparación, una vida útil más larga, además de una satisfacción momentánea con ayuda de las grasas saturadas, azúcar, sal y aditivos, que generan dopamina en el cerebro.

Pero, sus beneficios se quedan cortos al lado de las problemáticas que estos pueden tener en la salud de quienes los consumen, como la obesidad, las enfermedades cardiovasculares y la diabetes.

Estos alimentos se definen por ser formulaciones con ingredientes excesivamente industrializados, que fueron resultado de procesos industriales, y solo algunos de ellos cuentan con alimento integral.

Y aunque no es algo nuevo, cada vez afecta más no solo a la salud de los seres humanos sino también la del planeta.

En su proceso de fabricación se consume mucha energía y largas cadenas de suministros, lo que provoca importantes emisiones de gases de efecto invernadero y por su defecto son parte del problema del calentamiento global. 

Aunque los impactos más sustanciales se encuentran en el proceso de creación y empaque del producto final, ya que este sobreenvasado genera una gigantesca cantidad de residuos que no se degradan en los vertederos ni en la naturaleza, afectando así los suelos y la vida marina.

No existe una manera rápida de solucionar esta problemática, pero algunas alternativas como realizar prácticas agrícolas sostenibles donde se busque la agricultura regenerativa, reducir desechos y el abastecimiento local de ingredientes, pueden ayudar a minimizar el impacto del carbono de la UPF.

Avances en la tecnología agrícola pueden servir para ahorrar agua, restaurar hábitats y preservar la biodiversidad.

De igual forma, apoyar a empresas locales que priorizan el uso de ingredientes sostenibles ayudaría no solo a fomentar un ecosistema alimentario más saludable, sino también crear una resiliencia en la comunidad y el desarrollo económico regional.

(Con información de The Conversation)