Redacción/CDMX
La lengua castellana ofrece universalidad, más que ningún otro idioma, a quienes escriben en este lenguaje hablado por cientos de millones de personas, aseguró Horacio Castellanos Moya, escritor que nació en Honduras pero que tiene la nacionalidad salvadoreña.
Considera que es un privilegio, pertenecer a esta lengua porque permite “que seas entendido y leído por mucha más gente que, por ejemplo, quien escribe en una lengua pequeña del este de Europa”.
Dijo que hablar castellano es sinónimo de identidad global pero también un sentido de pertenencia al país donde nació, por las variaciones que el español tiene en cada territorio.
El autor de “Moronga”, afirma que escribir desde el exilio, donde ha vivido en países como México, Japón, Alemania y actualmente Estados Unidos, donde se desempeña como profesor en la Universidad de Iowa, además de desarraigo le ha ofrecido perspectiva de la manera de vivir en Centroamérica.
“Solo mis últimas dos novelas suceden fuera de lo que es México y Centroamérica, son personajes que recuerdan y que viven Centroamérica como un dolor que traen, como una herida, como una necesidad de olvido, como un rencor”.
Tras escribir El asco (2007), una crítica a los procesos sociales y políticos posguerra en El Salvador, Castellanos Moya recibió amenazas que le advertían no regresar al país.
Sin embargo, mantiene que cuando “uno escribe por necesidad de decir, cuando uno escribe no se pone a pensar, uno no sabe que va a pagar un precio, pero no sabe qué precio, el destino es el que cobra”.
Deja claro que la vida es muy dura en Centroamérica por los niveles de pobreza, de desigualdad, de falta de oportunidades, “por eso es que todo mundo se quiere ir”.
(Con información de Crónica)