Redacción/CDMX
Pedro Salazar Gutiérrez, murió a los 95 años en su natal Santa María Ixcatlán, Oaxaca, era uno de los últimos hablantes del ixcateco.
El ixcateco se encuentra en riesgo de desaparecer debido a que cada vez menos personas hablan de manera fluida esta lengua.
Comparte la característica tonal de otras lenguas otomangueanas, es decir, pertenecientes a la región que se ubica al centro de México y al norte de Costa Rica.
Hasta el 2019, El Instituto Nacional de Lenguas Indígenas (Inali) identificó que solo existen 10 personas hablantes del ixcateco, donde incluían a don Pedro.
En el censo de 2010, se identificaron 190 habitantes que hablaban esta lengua.
Él mismo participó en la traducción del libro Fábulas de Esopo, que se editó con fines de preservación.
Fue colaborador del Centro Profesional Indígena de Asesoría, Defensa y Traducción (Cepiadent).
Tanto el Inali, la biblioteca Juan de Córdova, de la Fundación Alfredo Harp Helú, lamentaron el deceso del promotor de la lengua, a la que también se le conoce como Xjuani.
Un blog publicado por el Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas publicó un material didáctico en 2019 llamado “Aprende Ixcateco de Santa María, Ixcatlán, Oaxaca”, que es una archivo de Soundcloud con frases y enunciados comunes de la lengua en peligro de extinción.
(Con información de Excélsior)