La rana de cristal deja ver el futuro de la investigación sobre la coagulación

Redacción/CDMX

La rana de cristal tiene la capacidad de volverse “invisible” cuando duerme y ello, podría mostrar claves para comprender los mecanismos de coagulación en la sangre del ser humano.

Hay unas 150 especies que habitan desde el sur de México hasta el noroccidente de Ecuador.

¿Cómo se vuelve invisible?

Estos anfibios tienen la capacidad de concentrar su sangre en el hígado sin que se vean afectados por coágulos.

Tal descubrimiento podría abrir el camino para avanzar en el campo de la medicina que trata los peligros de los coágulos.

Biólogos del Museo de Historia Natural de Nueva York y de la Universidad de Duke comenzaron a estudiar a las ranas en Panamá y después en laboratorio.

La rana, cuyo tamaño no rebasa el de una estampilla postal, duerme en las brillantes hojas verdes en los trópicos.

A fin de escapar de la atención de posibles depredadores, puede volver su cuerpo 61 por ciento más trasparente, confundiéndose con la hoja.

En el sueño, las ranas logran extraer el 90 por ciento de los glóbulos rojos de la sangre en sus sistema circulatorio.

Estos los concentra en el hígado, de está forma este órgano llega a doblar su tamaño, al tiempo que el cuerpo del anfibio se vuelve transparente.

El plasma de las ranas sigue circulando por su cuerpo, pero sin los glóbulos rojos, que están concentrados en el hígado, sin que se genere un coágulo.

Cuando el pequeño animal se reactiva, libera los glóbulos rojos y el hígado regresa a su tamaño normal.

En la mayoría de los animales, la aglomeración de sangre ocasiona coágulos que pueden ser mortales, como al generarse infartos en humanos.

Cuando se busca evitar coágulos, se utilizan medicamentos, pero al mismo tiempo, estos pueden generar riesgos de sangrados, pero las ranas cuentan con algún anticoagulante o mecanismo bioquímico que les permite no afectar su coagulación normal.

(Con información de BBC News Mundo)