De 2010 a 2020, México se colocó como el primer lugar exportador de cerveza a nivel mundial, superando a Países Bajos, Bélgica y Alemania, de acuerdo al INEGI
Redacción/CDMX
Un estudio realizado por el Departamento de Genética y Biología Molecular del CINVESTAV del IPN a cargo de Jaime García Mena y Fernando Hernández Quiroz dio como resultado que beber, de manera moderada, cerveza sin alcohol tipo lager, puede ser benéfico para nuestra salud.
Con la ayuda del Consejo de Investigación Sobre Salud y Cerveza de México se inicio un estudio con 35 personas de ambos sexos entre los 20 y 50 años, quienes consumieron una lata de cerveza sin alcohol (0.5%) tipo lager de 355 ml, acompañada de alimentos durante un mes.
Tuvieron revisiones después de 15 y 30 días, donde sus valoraciones consistían en medir las características antropométricas y pruebas bioquímicas donde se evaluaban varios metabolitos en sangre.
Al valorarlos, encontraron una disminución notable en los niveles de glucosa (cuando los participantes estaban en ayunas) dentro de los rangos normales y un aumento moderado en la funcionalidad de células beta activas en el páncreas donde se produce la insulina.
“Tener niveles bajos de glucosa es algo interesante si se relaciona con el consumo de cerveza, porque los mexicanos al ser propensos a padecer diabetes tipo 2 en la madurez, en muchos casos presentan un descontrol en la cantidad de glucosa por las mañanas”, explicó García Mena.
Un dato importante encontrado por el proyecto fue que el consumo de cerveza no es causante del aumento en el índice corporal de las personas o que tenga relación con que la cintura y cadera aumentara, esto es gracias al aumento de bacterias llamadas Bacteroidetes y Firmicutes.
“Lo que se puede decir, a manera de conclusión es que, en los mexicanos, el consumo moderado de cerveza sin alcohol baja la glucosa del torrente sanguíneo en ayunas y causa un cambio en la microbiota, promoviendo un incremento en la abundancia de bacterias relacionadas con peso normal”, sostuvo Jaime García Mena.