Con Abrazar la vida/honrar a los muertos la compañía franco-mexicana Teatro Entre2 vuelve a poner sobre la mesa la idea de muerte, de ritual, de despedida, de epidemia y de espacio público
Ana León / Ciudad de México
Arnaud Charpentier está preocupado por la situación actual del teatro. Director de la compañía franco-mexicana Teatro Entre2, reflexiona desde ese espacio lo que la pandemia ha significado en lo personal pero, sobre todo, en su quehacer profesional. Cuando la clausura del espacio público fue inminente, las funciones en vivo inviables y la cercanía con el público cerraba su puerta rotundamente, el gremio en el que se encuentra este director de teatro y todos los profesionales involucrados en las artes vivas tuvieron que empezar a explorar otras formas de que su arte no fuera clausurado.
Aunque no es considerado actividad escencial por nuestras autoridades, la cultura, la música, el cine, los libros, las artes vivas (en línea) han sido fieles compañeras de aquellos que tienen la necesidad —y, sobre todo, la posibilidad— de consumir historias. De vivir el afuera desde la ficción mientras se espera a que en la realidad el encuentro con el otro sea un lugar seguro.
En aquellos días su respuesta se alejó de la virtualidad que abrazaron otros de sus colegas. Gracias a una beca que ya tenían, lanzaron una propuesta llamada Funeral sobre ruedas, una intervención sin miedo, una especie de funeral sobre ruedas y cortejo fúnebre que sobre la vía pública circulaba en bicis y triciclos. Aquella propuesta recorrió las calles en algunos días del mes de noviembre cuando el semáforo estaba en color naranja. Estos «rituales fugaces poéticos» como lo llama Arnaud, pusieron sobre la mesa justo este tema crucial en la pandemia: nuestra relación con la muerte. La imposibilidad de despedir a aquellos que se han ido víctima de la enfermedad y que debido a las actuales condiciones, la despedida, los rituales de despedida, ese cierre de ciclo, también se ha negado.
Ahora, meses después de aquellas intervenciones en el espacio público, lugar que también se puso en jaque con la pandemia, la compañía lanza una extensión se aquellas reflexiones: unen el material de video que aquellas ocho salidas de noviembre pero «mezclado con nuevas aportaciones de cada miembro del equipo», como explica Arnaud en entrevista. A partir del universo de Funeral sobre ruedas, cada miembro del equipo armó un monólogo de tres minutos «en un lenguaje pensado para cámara […] Y a partir de sus reflexiones sobre la muerte, sobre la nueva normalidad, sobre la cultura en tiempos pandémicos y sobre el espacio público». De manera libre se propone este ejercicio frente a cámara que es apoyado luego con producción y dirección artística. Abrazar la vida/honrar a los muertos es una especie de «rompecabezas», como lo define el director de esta compañía, por la forma en que se ha armado.
Arnaud Charpentier reflexiona sobre esta dualidad de la modernidad y la forma en que se plantea es pérdida de los rituales, sobre la carga de humanidad que está asentada en ellos y las dinámicas que está transformando la enfermedad. No porque no estuviera ahí antes, sino por la forma acelerada en que los ha transformada. «¿Seguiremos siendo humanos?», se pregunta; «¿será posible pensar en una humanidad si no nos tocamos?»
«¿Qué es la vida? ¿Qué es una vida digna? ¿Qué vale una vida confinada? ¿Qué mundo quiero para mis hijos?», son algunas de las preguntas que se hace este actor y director de teatro frente a un escenario que ha puesto en jaque no sólo el espacio privado, sino también la vida profesional.
Por ahora, para este profesional de la escena, es necesario ahora —si bien ya lo era antes— sacar el teatro del teatro, que el teatro sea al aire libre; pero también es necesario apoyos del gobierno para todos aquellos que se han profesionalizado en esta materia y que siguen profesionalizándose. De lo contrario ¿tendrían que volver a una condición de saltimbanquis?
El proyecto lo realizan Teatro Entre2, compañía franco-mexicana fundada en la Ciudad de México en 2010 por Arnaud Charpentier (director), Francia Castañeda (gestión y actriz) y Olivier Dautais (pintor). Poráy, agencia de ecoturismo. Se dedican a brindar experiencias en bicicleta, renta de bicicletas y tours guiados en los que hablan sobre la historia arquitectura, arte cultura y diversidad de la Ciudad de México. Y el Hogar Colectivo, una asociación civil sin fines de lucro que busca reintegrar la muerte al cuidado de la vida. En respuesta a la industria funeraria actual, su objetivo es transformar el acercamiento que el individuo tiene con la muerte hacia un morir más ético, justo, positivo, humano y sostenible.
Las funciones vía Facebook Live se llevarán a cabo el sábado 27 y el domingo 28 de marzo de 2021 a las 19 horas en la cuenta del Museo Universitario del Chopo y también a través de su Youtube.
Imagen: Cortesía del Museo Universitario del Chopo