Zeitkratzer, la fisicalidad del sonido

En su segunda presentación en México, luego de interpretar una obra de Stockhausen, el ensamble berlinés se centrará en Metal Machine Music de Lou Reed

Ciudad de México (N22/Ana León).- «Una composición electrónica instrumental», así fue como definió Lou Reed su quinto disco Metal Machine Music (1975), que según se dice, fue la forma en que el músico neoyorquino se vengó de su disquera RCA y la excusa para romper su contrato, aunque Reed lo ha negado. Muchos años después (2014), el ensamble Zeitkratzer lo retomó y puso su sello en él. Aunque en un principio a Reed le pareció una idea descabellada, cuando los músicos le presentaron la primera grabación que se adaptó a piano, corno francés, violín y demás instrumentos incluidos en este conjunto de músicos europeos, quedó fascinado.

De todos los trabajos que han realizado es éste el que presentarán en su segunda presentación durante su primera visita a México, esto en la Casa del Lago la noche de este viernes a las 21 horas. La noche de ayer presentaron Aus den Sieben Tagen, de Stockhausen. A propósito de esta visita charlamos con tres de los nueve elementos de este ensamble –Frank Gratkowski (Clarinete / Berlín); Hayden Chisholm (saxofón/ Belgrado); Hilary Jefferey (trombón / Berlín); Hild Sofie Tafjord (corno francés / Oslo); Reinhold Friedl (piano / Viena); Maurice De Martin (percusión / Berlín); Lisa Marie Landgraf (violín / Palermo); Elisabeth Coudoux (violoncello / Colonia); Ulrich Phillipp (contrabajo / Wiesbaden); Klaus Dobbrick (sonido / Berlín).

Sobre Stockhausen y Lou Reed, ¿cómo entender el trabajo del grupo a la luz de estas dos interpretaciones, primero de Aus den Sieben Tagen y luego de Metal Machine Music?

Reinhold Friedl: La idea es que vengan al show y escuchen. Pero es muy emblemático para el grupo tocar a Stockhausen y Lou Reed, compositores de vanguardia y de música contemporánea; Lou Reed es un héroe del rock and roll. El show es un poco el carácter de lo que es el ensamble Zeitkratzer, escoger lo que nos gusta, no nos interesa la distinción social de la música. Esto es acerca del sonido y de sus cualidades, porque la pieza de Lou Reed es música avant garde pura y Stockhausen es también rock and roll. Entonces hay que ser un poco curiosos; de alguna manera también son puntos extremos.

De izquierda a derecha:
Reinhold Friedl,
Hild Sofie Tafjord y
Lisa Marie Landgraf


Leí que se definen como un sonido tangible, visible, corpóreo…

Hild Sofie Tafjord: Creo que esta es una buena descripción de la música de Zeitkratzer y de la forma en que tocamos. El sonido del ensamble es muy rico, hay varias y diferentes cualidades de sonido, táctiles. Para mí es una música muy física, toco el corno francés y  tienes que trabajar muy duro físicamente para ser capaz de tocar, especialmente porque trabajamos en varias técnicas alternativas, no las formas normales de tocar instrumentos. Cada músico en Zeitkratzer tiene su propio vocabulario, que es muy especial y un poco diferente, no el típico o el que se suele llamar la forma “normal” de tocar.

Reinhold Friedl: Es muy físico.

Lisa Marie Landgraf: Para mí es mucho acerca de la corporalidad, de estar ahí. Para mí Zeitkratzer no es acerca de si el sonido es rudo, dulce o bello o detestable o feo, todo es acerca de la cualidad del sonido. Cualquier cosa que hago trato de estar realmente, absolutamente ahí, lo que como músico se supone siempre debes hacer. Pero si quieres conseguir tocar en un concierto tienes que empezar a entender este flujo, seguir la arquitectura (de la música), ahí hay mucho de improvisación, de interacción y mucho se produce en el momento, ya que proviene de diferentes situaciones. Realmente se trata mucho de estar ahí. Es muy demandante y muy satisfactorio.

¿Cuál consideran es la mayor aportación de Stockhausen a la música contemporánea?

Reinhold Friedl: Es una mala pregunta porque cualquier pieza que pienses es realmente buena música, mucha buena música, es deslumbrante. Pero si me preguntas con qué pieza empezar diría que “Gesang der Jünglinge”, de lo más puro y un poco escalofriante, pero también me gusta mucho el Studie 2, una pieza muy corta, dos minutos con 48, un pieza bastante buena del principio de la electrónica.


Leí que no se preocupan por la pureza de la música en el sentido más académico, que juegan con ella, pero al mismo tiempo han hecho del noise algo “respetable”, le quitan esa etiqueta de “under” al llevarlo a la sala de conciertos, ¿cómo jugar con esta dualidad en su trabajo, en la música?

Hild Sofie Tafjord: Una de las grandes discusiones es ¿qué es “noise”?

Lisa Marie Landgraf: es como otro elemento del cual puedes echar mano, que puede ser usado

Hild Sofie Tafjord: Esa es una de la cualidades de Zeitkratzer, no discriminar en lo que es “usable” o no, todo puede usarse y es cómo lo entendemos al final.

Lisa Marie Landgraf: A mí no me gusta mucho esta idea de “jugar con la música”, para mí el objetivo de Zeitkratzer es transformar algo y lo que resulta de alguna forma es algo nuevo. Pero para mí no va por ese sentido de jugar con los materiales o con lo que hacemos.

¿Cómo es la selección del trabajo de otro músico para integrarlo al propio?

Reinhold Friedl: Primero hay una escucha y luego lo pensamos. Tienes que empezar por escuchar todo el trabajo y luego viene alguna idea, la discusión sobre varias ideas, sobre diferentes piezas para elegir alguna que sea interesante para nosotros. Luego empezamos a discutirla, a desarrollar sonidos, pero lo primero es escuchar.

Respecto a Lou Reed

Reinhold Friedl (piano): Metal Machine Music (1975) es un enorme referente de la música industrial. Todo el mundo pensó que era una provocación, y para nosotros fue interesante porque el sonido es como el de Persepolis (1972), de Iannis Xenakis, el noise, el sonido, pero es muy similar y del mismo tiempo, de los setentas, y es muy interesante este trabajo de Lou Reed y también el Anemoessa de Xenakis, una especie de paráfrasis de Persepolis. Si escuchas a Xenakis puedes escuchar a Lou Reed […] así que hay que abrirse al mundo y a otros muchos proyectos. Puedes escuchar a Xenakis, que es bastante interesante y que te abre la puerta a muchos otros propuestas.


Luego conocimos a Lou Reed y discutimos con él, se volvió completamente loco cuando le dije que queríamos hacer esto con Metal Machine Music con piano, con violín, con corno, con acordeón, él rió, pero después escuchó la primera grabación y dijo “¡wow!” Así fue un poco el acercamiento para este primer proyecto.

¿Cómo describir su trabajo a alguien que no lo conoce?

Lisa Marie Landgraf: Para mí Zeitkratzer es la única manera de creer en un futuro posible, lo que hago. Es todo acerca de esta transformación, de estar ahí, de permanecer, especialmente con todo lo que pasa en el mundo, es la única cosa en la que creo y veo un futuro.

Hild Sofie Tafjord: creo que al final es abrirnos al mundo, el sonido es realmente volver a escucharnos. Es una invitación, los diferentes proyectos de Zeitkratzer tienen diferentes áreas de sonido, el sonido es a veces etéreo, denso, ruidoso, y es también muy lírico. Adentrarse en la experiencia Zeitkratzer puede ser muy diferente, y es un poco difícil explicar cuáles pueden ser estas formas de lo que hacemos.

Lisa Marie Landgraf: Al final todo es comunicación e interacción. El 60 o 70% de la producción tiene que ver con la conversación previa. Es darnos la oportunidad de descubrir, es mucho acerca de la confianza.

Reinhold Friedl : Se trata también de todos estos músicos que venimos de diferentes partes de Europa y con diferentes antecedentes, historias, puedes escuchar noise, jazz, improvisación, a veces realmente no sabes qué es lo que viene, pero es interesante ver qué pasa. Y eso es también una apropiación, tomamos y tomamos y tocamos.  

Imágenes: © Ana León