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A los 84 años de edad falleció el “poeta del verso amplio” a causa de complicaciones respiratorias
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Ciudad de México (N22/Redacción).- Ayer por la noche el Instituto Nacional de Bellas Artes dio a conocer el lamentable fallecimiento del poeta chiapaneco Juan Bañuelos (1932-2017). De acuerdo con el INBA, los restos del poeta serán velados a partir de las 22 horas en la funeraria J. García López, ubicada en la colonia Juárez, en la Ciudad de México.
La muerte, anunciada por el INBA, fue confirmada posteriormente por su hija, Cecilia Bañuelos, como se anunció en la revista Proceso. El deceso se produjo a las 14 horas del miércoles debido a complicaciones respiratorias.
Originario de Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, el escritor realizó sus estudios en las facultades de Derecho, Filosofía y Letras y en la de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, en donde coordinó, además, los talleres de poesía, junto a los de otras universidades como las de Chiapas, Guerrero, Querétaro y Sinaloa.
Formó parte del grupo integrado por cinco poetas mexicanos que en 1960 publicaron el volumen colectivo La Espiga Amotinada. En la cual se incluían obras como: “Puertas del mundo”, de Juan Bañuelos; “La voz desbocada”, de Óscar Oliva; “La rueda y el eco”, de Jaime Augusto Shelley; “Los soles de la noche”, de Eraclio Zepeda; y “El descenso”, de Jaime Labastida. Éste último comentó al diario Excélsior:
“Perdemos al gran poeta del verso amplio y de la imagen profunda. Se ha ido un grandísimo poeta. Y aunque casi siempre se pone el acento en su actividad política y en su defensa del movimiento zapatista, lo que va a restar de él es su gran poesía. Estoy verdaderamente consternado porque fuimos amigos durante 60 años.”
El llamado “poeta del verso amplio” fue reconocido con el Premio Bellas Artes de Poesía Aguascalientes, en 1968; con el Premio Chiapas en la rama de Arte, en 1984; con el Premio Nacional Carlos Pellicer, en 2001; y con el Premio de Poesía José Lezama Lima, en 2005.
Entre sus obras más destacadas se encuentran: “Puertas del mundo”, en La espiga amotinada (1960), Escribo en las paredes (1965), Espejo humeante (1969), No consta en actas (1971), Destino arbitrario (1982) y Donde muere la lluvia (1992).
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