Demos un paseo por la Gliptoteca del Munal

  • Más de 70 figuras en yeso, mármol, bronce, terracota, barro, piedra y
    madera dan cuenta del trabajo en esta disciplina durante los siglos XIX y XX.

Ciudad de México, 25/01/17 (N22).- Un
recorrido por la evolución de la escultura mexicana, principalmente de los siglos
XIX y XX, es lo que ofrece la Gliptoteca del Museo Nacional de Arte (Munal) que
mantiene en exhibición la muestra De la piedra al barro.
La
primera Gliptoteca en la historia del recinto, espacio dedicado a la
presentación de esculturas, está integrada por más de 70 figuras en yeso,
mármol, bronce, terracota, barro, piedra y madera, además de dibujos, estudios,
litografías y óleos, cuya admiración es una delicia para el espectador.
Y
es que en De la piedra al barro. Escultura Mexicana. Siglos XIX y XX, el
público puede descubrir la trayectoria de los hitos y los nexos del pasado de
la escultura y apreciar el valor de la contemporánea.
La
muestra escultórica recibe al visitante con la maqueta en bronce de la Estatua
ecuestre de Carlos IV de Manuel Tolsá, después presenta piezas de estilo
grecolatino y neoclásico, y escenas costumbristas. También da paso a la
escultura nacionalista, la Escuela Mexicana con temas posrevolucionarios como
la importancia de la educación, así como la modernidad en esta disciplina, con
desnudos y cuestiones de erotismo.
Para
el señor Adán Pérez Zúñiga la muestra resultó “muy interesante, muy bonita,
sobre todo muy ilustrativa” y es que acudió al Munal porque ahí estudió, cuando
en los años sesenta del siglo pasado el recinto albergó la Escuela Superior de
Comercio y Administración del Politécnico Nacional.
Aunque
en un inicio visitó al Munal para admirar la herrería de sus barandales, hechos
en Italia, y para adentrarse en la obra de José María Velasco, el gran
paisajista mexicano, quedó sorprendido con la exposición De la piedra al barro.
“Todas
las estatuas, los mármoles, son de grandes artistas y muy bien, como dicen los
que saben, la curaduría, la distribución de las salas, para mí que vengo de
Querétaro después de que viví aquí 52 años, me parece muy atractiva”.
Y
es que, reconoció, en nuestro país no es muy común observar exposiciones de
escultura. “No había visto otra de este calado, de este tamaño, se expone
alguna que otra figura, sobre todo en Bellas Artes, pero aquí encuentro una
gran cantidad y una gran variedad y todas muy interesantes, muy hermosas”.
Por
su parte, Ricardo Cruz destacó que en esta exposición se pueden admirar las
diferentes facetas de la escultura mexicana a través de las décadas y “cómo la expresión
del cuerpo humano ha cambiado a través del tiempo”.
Precisó
que en De la piedra al barro, si bien “encontramos ciertos paralelismos del
arte europeo”, ya que los escultores siguieron los cánones de la escultura
universal, se puede apreciar cómo se van separando y los artistas mexicanos y
latinoamericanos encuentran su propio estilo.
Desde
Ecatepec, llegó al Munal Guillermo Mondragón con su hijo, a quien dejaron de
tarea la visita a la exposición. “Está interesante, nunca había venido aquí,
son cosas que uno no conoce, que no ve tan seguido”, señaló el padre quien dijo
que aprovecharía su estancia en el recinto para apreciar otras muestras.
Mientras
que Jaqueline, procedente de Lima, Perú, aseguró que para ella “es una
maravillosa exposición: la escultura, el arte, el tipo de pintura, es
extraordinario en realidad”.
Fue
el primer acercamiento de la peruana al arte mexicano. “En verdad me quedo muy
sorprendida y muy encantada, porque se ve la evolución y muestra también un
poco de la historia de México”.
Finalmente,
el señor Jorge Gutiérrez acudió a la exposición en busca de alguna obra de su
bisabuelo, el pintor Felipe Santiago Gutiérrez y la encontró, pues De la piedra
al barro exhibe La cazadora de los Andes, óleo de ese autor de 1891.
De
la muestra, dijo Jorge Gutiérrez procedente de Cuernavaca, Morelos, “es
fantástica, está muy bien, sí recomendaría a la gente que viniera”.
De
la piedra al barro. Escultura mexicana. Siglos XIX y XX, bajo la curaduría de
Víctor Rodríguez Rangel, presenta a la escultura como algo central y no sólo
como un aspecto decorativo, con obras de grandes exponentes como José María
Labastida, Manuel Vilar, Gabriel Guerra, Miguel Noreña, Fidencio Lucano Nava y
Luis Ortiz Monasterio.
Cabe
señalar que el público no sólo podrá admirar esculturas, pues la muestra está
acompañada de bocetos, estudios y óleos, entre los que destaca Los Reyes Magos
de Ángel Zárraga, que recientemente se ha integrado a la colección del Munal,
integrada por más de cuatro mil piezas.
De
la piedra al barro. Escultura mexicana. Siglos XIX y XX está abierta desde el
pasado 17 de agosto en el Museo Nacional de Arte, calle Tacuba No. 8, Centro
Histórico de la Ciudad de México.

Imagen: Secretaría de Cultura
17AM

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