El espíritu del líder, el show del comandante y su recuerdo

Por Víctor Gaspar 

@gaspar_victor

En una capilla pequeña, de madera, en un país cerca
del ecuador… «de repente entró un pajarito,
chiquitico, y me dio tres vueltas aquí arriba. Se paró en una viga de madera y empezó
a silbar, un silbido ahí, bonito. Entonces yo me le quedé viendo y también le
silbé, pues. Si tú silvas yo silvo, entonces le silbé. El pajarito me vio raro, silbó
un ratico, me dio una vuelta y se fue. Yo sentí el espíritu de él, lo sentí como
dándonos una bendición, diciéndonos hoy arranca la batalla, vayan a la Victoria,
tienen nuestras bendiciones. Así lo sentí yo, desde mi alma».

Esa fue la versión del ultimo encuentro de Nicolás
Maduro con su antecesor, uno de los más polémicos lideres latinoamericanos que
es tema de Comandante, la Venezuela de
Hugo Chávez, libro del periodista irlandés Rory Carroll (Dublin, 1972). Fue
asignado como corresponsal en Caracas en 2006 para el diario británico The
Guardian luego de cubrir diversos temas en Congo, Zimbabwe e Irak, país donde
fue secuestrado por dos días.

«La historia que cuento en el libro es
la historia de un hombre con muchísimo talento y con muchas buenas intenciones,
pero que se perdió en el poder, el poder se lo comió. Es la historia de cómo
Venezuela cayó, básicamente, en una farsa de revolución, lleno de anécdotas de
humor negro, y al final fue una tragicomedia», explicó.

Durante los seis años que duró su estancia en
Venezuela, Carroll reunió cuatro cajas de cuadernos con anotaciones de la
situación del país, reflexiones y comentarios reunidos con personas allegadas
al lider pero también con venezolanos de
a pie.

«Para mí fue importante incluir muchas
voces, gente que conoció muy bien al presidente Hugo Chávez, entre ellos varios
del Palacio de Miraflores, el Palacio Presidencial, para hablar con los
guardaespaldas, ministros, gente que conoció a sus amantes, y también viajé por
casi cada rincón del país, de Venezuela, para ver las consecuencias de la
revolución bolivariana y así construir un retrato completo de lo que pasa».

¿Qué faceta del Hugo Chávez fue la que más te
sorprendió?

– Fue su capacidad de mantener el nivel
de apoyo y amor mientras estaba arruinando el país y eso fue a través de su
carisma, su talento, también, para utilizar pan y circo. El al final era un
genio político y aun cuando él estaba muriendo de cáncer, y el país y la
economía estaban arruinados, todavía convenció la mayoría de los venezolanos de
votar por él y ese fue impresionante.

¿Entonces fue una elección legitima?

– En su última elección en 2012, sí. La
elección no fue cien por ciento limpia pero yo creo que él ganó de verdad la
mayoría de los votos.

¿Cómo cambió Venezuela desde tu llegada en 2006 hasta
que dejaste el país?

– Fue una historia de lapidación y
deterioro de la infraestructura, aún moralmente si atendemos  al nivel del delincuencia y corrupción. Al
final este deterioro llegó hasta el palacio mismo, me acuerdo unas veces cuando
fui a asistir a charlas con el presidente y él estaba hablando sobre las
maravillas, las obras magníficas de la revolución, pero el palacio mismo estaba
arruinado. Yo recuerdo fuertemente que había un dolor de orina en los jardines
del palacio, el techo estaba falto de cuidado y era como el símbolo del Potemkin
village, en inglés, la fachada de la revolución, pero detrás ruina.

El Comandante Hugo Chávez también fue conocido por sus
constantes enfrentamientos con el expresidente estadounidense George Busg y su
cercanía con lideres como el presidente ruso Vladimir Putin y el ex presidente
iraní Mahmud
Ahmadineyad.

Para el periodista el mejor regalo que Chávez, creo yo,
recibió en toda su vida fue George Bush, porque había tanta rabia en el mundo
en contra de George Bush después de la invasión a Irak, que Chávez se postuló
como el anti Bush y eso fue suficiente para convencer, encantar a muchos
extranjeros, sobre todo en Europa pero también en los Estados Unidos y el resto
de Latinoamérica. Luego para mucha gente fue eso suficiente, él odia a Bush,es
rebelde. Porque con respecto al resto de sus supuestas alianzas con Irán y
Rusia fue, sobre todo, a nivel retórico. Por ejemplo, había un pacto nuclear
con Rusia pero fue como puro teatro porque al final nada pasó y todas las
supuestas colaboraciones económicas con Irán, -iban a construir fábricas de
tractores y tal- al final casi nada pasó, fueron unas fábricas ya oxidadas
entonces pues fue simplemente como una alianza retórica más que todo.

Por otro lado, el líder bolivariano también tuvo una
cercana relación con otros líderes como Evo Morales y muy marcadamente con
Fidel Castro. ¿Cómo era esa relación?

– Sí, esa fue la gran excepción, que él hizo
una alianza súper fuerte con Cuba hasta que los cubanos – y es un capítulo del
libro- básicamente tomaron control de la sala situacional, que fue como una
sala dentro del palacio, que fue como el cerebro de la presidencia.Él usó,
contrató, a muchos de los agentes cubanos como guardaespaldas y también como
agencia de inteligencia hasta que al final usaban también la bandera cubana.
Eso fue un ejemplo, como la cola del perro controlando al perro porque Cuba,
siendo más chico y más pobre, al final tenía una influencia fortísima sobre
Venezuela. La gran ironía es que Chávez siempre hablaba de la soberanía, que él
estaba recuperando la soberanía de Venezuela. Pero al final Venezuela perdió
mucha soberanía ante los Castro. Fue una relación cercana, filial, como el hijo
de Fidel. Tenían una relación de verdad tan fuerte que incluso una vez Chávez
logró convencer a Fidel Castro de cantar con él. Él tiene fama de ser el único
cubano que no canta ni baila, pero una vez estaba con Chávez en un evento y tenía
tanto cariño por Hugo Chávez que, cuando Chávez empezó a cantar, Fidel lo intentó,
musicalmente fue un desastre. Pero fue una confidencia que Fidel tenía
muchísimo cariño y había invertido casi todo en esa relación con Chávez.

Pero además del carisma de Chávez está su presencia en
los medios de comunicación, baste mencionar su programa Aló, Presidente

– Él tenía tanto talento mediático que,
al final, casi cada evento fue televisado. Venezuela se convirtió en una
especie de Truman Show, que casi toda la vida de Chávez pasó frente a las
cámaras. Una vez también yo fui parte del show como huésped en Aló Presidente y
yo hice una pregunta y a él no le gustó la pregunta y me la convirtió como en
una pelota retórica de una manera muy astuto. Fue siempre así, él tenía talento
para crear drama y así ganar la atención de la gente y mantenerla y distraer a
la gente de los problemas del país, y lo hizo por 14 años.

Hablabas de petropopulismo…

– Él hizo supuestamente como una renacionalización
PDVSA y él hizo mucha retórica con respecto de recuperar la soberanía petrolera
de Venezuela. Pero eso también fue como un fiasco porque PDVSA descuidó el
mantenimiento y sus propias inversiones. Él básicamente saboteó su propia gallina
de oro. Hoy Venezuela está sufriendo la llegada de esta ruina.

¿Qué estado guarda la libertad de expresión para el
ejercicio periodístico?

– Había, y todavía hay, espacio. Hay
libertad de expresión pero siempre más pequeño. La política oficial del gobierno
de la revolución era tener hegemonía informativa. Al final lo hicieron en el
sentido de que intimidaron a mucha de la prensa independiente y crearon muchos
canales del Estado. Al final fue sólo una voz, la de Hugo Chávez, y la prensa
independiente fue muy chiquita hasta que ahora, Henrique Capriles, el líder de
la oposición, apenas puede difundir su mensaje. La gente, sobre todo fuera de
Caracas, no tiene manera de escuchar ni ver otros políticos de la oposición.

¿Qué futuro ves para Venezuela?

– Veo pocas razones para el optimismo. Lamentablemente
en Venezuela Nicolás Maduro está atrapado en este laberinto de petropopulismo y
hasta ahora no mostrado ninguna capacidad de cambiar la política y reducir las
distorciones que están estrangulando la economía. Tampoco tiene el mismo
carisma de Hugo Chávez ni su legitimidad. Por eso es como una versión del mini
me, está intentando canalizar el espíritu de Hugo Chávez, un poco como Madonna
con Evita, pero no funciona, no sirve, la gente lo ve. Así es más difícil para
él distraer a la gente, él hace los mismos trucos que Chávez pero no es Chávez
y así la gente está más enfocada en los problemas del país.  Por ejemplo, el último truco fue expulsar
tres diplomáticos americanos culpándolos de sabotaje económico, y eso es algo
que Chávez solía hacer a menudo. Pero desde que Maduro lo ha hecho, lo que la
gente ve es que es simplemente un esfuerzo para distraerla, y no sirve. Creo
que Maduro y Venezuela tienen un futuro bastante oscuro.

Comandante, la Venezuela de Hugo Chávez, en su versión
original en inglés, apareció el 7 de marzo en el Reino Unido y los Estados
Unidos, apenas dos días después de la muerte del lider venezolano. Comandante,
la Venezuela de Hugo Chávez, ha sido traducido al español, portugués, italiano,
polaco, estonio, mandarín e indonesio. En México aparece bajo el sello Sexto
Piso.

Imagen:http://bit.ly/15QBjqq

            http://bit.ly/1771ute

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