- “Los arsenales acumulados podrían aniquilar a unos 240 mil millones de seres humanos, es decir, un número 60 veces mayor que la población total del planeta», Alfonso García Robles, 1984.
- Fue nuestro primer Nobel y es el más desconocido, no hace mucho tiempo cumplió 100 años de su nacimiento y las autoridades no hicieron ningún homenaje
Por Alizbeth Mercado
(@alizbeat)
Distrito Federal, 11/04/13 (N22).- “El pensamiento recobra más actualidad. Porque desde los años cuarenta, en la Segunda Guerra Mundial comenzó a estudiar el fenómeno de la guerra, y buscó también hablar de la paz. Es muy elocuente y para ganar la guerra es preciso hablar de la paz, es uno de los temas que desarrolló y es súper actual con lo que pasa en el mundo. Hace poco Enrique Peña Nieto se refirió al problema de la desnuclearización, y justamente García Robles se va a destacar por hacer eso en América Latina y él es el pionero”, declaró el doctor Alberto Enríquez Perea, sobre el trabajo del primer premio Nobel mexicano, Adolfo García Robles.
El próximo 23 de abril el doctor Enríquez presentará el libro Homenaje a Alfonso García Robles. Premio Nobel de la Paz, 1982. El volumen se creó a partir de una compilación de cartas y documentos sobre la obra del diplomático. “Participamos varios investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de México, del Colegio de Michoacán y de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo; y miembros del servicio exterior mexicano retirados”, explicó.
La publicación tiene varias secciones, la primera fue escrita por los embajadores Pablo Macedo y Alberto González quienes trabajaron con él. Asimismo, contiene una cronobilbiografia que hizo la embajadora Aida González Martínez, que habla sobre el ingreso de Alfonso al servicio exterior.
Alfonso García Robles nació en Zamora, Michoacán, en 1911. Estudió Leyes en la Universidad Nacional y realizó estudios de posgrado en la Universidad de París. Desde 1939 mudó sus pasos hacia el servicio diplomático desde el exterior del país. En 1964 encabezó las negociaciones para la desnuclearización de América Latina, lo que culminó en la firma del tratado para la Proscripción de las Armas Nucleares en América Latina, conocido como Tratado de Tlatelolco.
En la década de 1970 fue representante permanente de México en las Naciones Unidas y en 1976 estuvo al frente del comité sobre el desarme con sede en Ginebra.
“García Robles empezó a trabajar como diplomático, participó mucho en la formación de la ONU, vio que en el mundo se acumuló una cantidad de armamento sobre todo en la Guerra Fría, por un lado. Por el otro, cuando estuvo el gobierno de Adolfo López Mateos pidió que se trabajara por la paz, entre otras cosas, para ver que en América Latina no hubiera armas nucleares”.
El premio Nobel más desconocido. Propuso prohibir los armamentos nucleares
Esta publicación busca difundir las ideas del Premio Nobel, las cuales no sólo se resumen a propuestas, la praxis lo llevó a conseguir el galardón en 1982.
“Fue nuestro primer Nobel y es el más desconocido, no hace mucho tiempo cumplió 100 años de su nacimiento y las autoridades no hicieron ningún homenaje. Justamente el año pasado se cumplieron los 30 años de que recibió el premio y realmente no hay una atención a la obra de Alfonso”, declaró Enríquez Perea.
La idea sobre desarme de García Robles fue asegurar la prohibición de los armamentos nucleares y de que América Latina no se implicara en ningún conflicto entre las grandes potencias rivales, durante la Guerra Fría.
Dentro de sus obras escritas destaca El Panamericanismo y la Política de Buena Vecindad (1938), De la Carta del Atlántico a la conferencia de San Francisco (2 vols. 1949), La desnuclearización de América Latina (1967), El Tratado de Tlatelolco (1967) y La Asamblea General del Desarme (1979).
En 1982 el comité sueco decidió otorgarle el premio Nobel de la Paz junto a la socióloga sueca Alva Myrdal.
“El premio que recibió Alfonso García Robles quiere decir que nuestra diplomacia ha llegado a ocupar excelentes puestos en el mundo y que líderes en la diplomacia mundial han sido mexicanos, no hay excusa para olvidar a García Robles”.
Enríquez piensa que a pesar de ser el primer Nobel mexicano, las autoridades han descuidado su imagen, ya que en el imaginario es poco conocido. “Creo que se debe al descuido y creo que es el motivo de este libro de que pongamos en el conocimiento de todos los mexicanos saber que tiene una obra muy importante. Hay una continuidad en el ejercicio del servicio diplomático que contribuye a la mejor forma de vivir con soluciones a los conflictos internacionales, y eso entendió bien Alfonso”.
La presentación del libro Homenaje a Alfonso García Robles. Premio Nobel de la Paz, 1982 será en la Capilla Alfonsina el próximo 23 de abril. Contará con la presencia de Alicia Reyes, Rosa Isabel Gaytan, Alfonso Sánchez Mujica, Javier Zarco Ledesma, César Callejas y el coordinador.
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