Educación en México sigue siendo desigual, tardía y compleja: Javier Garciadiego

Por Leslie Varela 

CIUDAD DE MÉXICO, México, 11/04/13,(N22).- La
educación en México sigue siendo desigual, tardía y compleja, la reforma a la
educación no resuelve por sí solo el problema, aunque sí deja entrever que el tema deja de ser rígido e intocable para
ser propositivo, comentó el historiador Javier Garciadiego durante la
presentación del libro La Historia de la educación en la Ciudad de México, en
el Colegio de México.

Los
comentarios a la reedición de La Historia de la educación en la Ciudad de
México, contó con la participación de los historiadores Gilberto Guevara
Niebla, Anne Staples, Javier Garciadiego y Mara Robles Villaseñor, secretaria
de Educación del Gobierno del Distrito Federal.

El
libro plantea un recorrido histórico de los cambios sociales, políticos y
económicos de la educación en la capital mexicana, desde sus orígenes
prehispánicos hasta un intento por abarcar el siglo XX en el que se señalan los
desafíos en cuanto equidad, cobertura, laicismo y género. 

Anne
Staples, coordinadora de la publicación, comentó en entrevista que a pesar de no ser
especialista del siglo XX, sí podía afirmar que aún hoy, la educación
tiene un nivel muy bajo, “funciona para mantener a la gente en su lugar, sin
muchas oportunidades y opciones de vida”;  sin embargo, afirmó que es vital animar a los jóvenes a superar sus
circunstancias individuales, pero sobre todo ayudarlos a entender el mundo en
términos globales para que puedan forjar, hasta cierto punto, sus propio
destino.

Excelencia en educación y diversidad, una apuesta a 100 años

Por
su parte, Javier Garcíadiego dijo que los rezagos educativos también son
nuestras fortalezas y que van a durar mucho tiempo en ser resueltas en materia
presupuestal, de calidad, de deserción, de cobertura. “Hay
que ver con más respeto, más comprensión al número de mexicanos comprometidos
con ese sector, como funcionarios, profesores, trabajadores, administrativos que
hacen una proeza diaria. La idea es tener una educación moderna, laica,
nacional pero preservando las particularidades regionales. Creo que el tema es
prioritario y que se necesitaba un cambio, y apostarle a 100 años de
futuro, esto no se soluciona en seis meses”.

-¿Se
sigue tomando a la Ciudad de México como punta de referencia para la toma de
decisiones a nivel nacional?

Anne
Staples: México sigue siendo sumanmente centralizado y como están aquí los
poderes federales, las grandes empresas, la mayor población y los mayores
impuestos, es una ciudad rica, desde luego sigue la Ciudad de México tratando
de dictar a los estados qué es lo que deben hacer cuando las circunstancias son
verdaderamente distintas. Siempre digo que de ninguna
manera la Ciudad representa todo el país, es muy desafortunado, pues seguimos con todo este
centralismo educativo tan brutal, porque es una cosa difícil de resolver. Del
otro lado de la moneda, cuando en el el siglo XIX, los municipios
estaban encargados de la educación, había gente animosa, intelectual, había
otros ayuntamientos donde eran analfabetas, alcoholizados o les valía la
educación, era un desastre, el problema es hasta qué punto uno depende del
ambiente local y hasta qué punto vale la pena que haya una instancia superior
que trata de igualar en cierto sentido las diferencias regionales.

Hay
que apostarle a la Reforma. Por una educación cívica y ética

Para
Mara Robles Villafuerte el convenio que se firmó el pasado 12 de marzo entre la
Secretaría de Educación del gobierno federal y el Distrito Federal es muy
significativo, porque por primera vez hay un reconocimiento de las partes para resolver los problemas de la educación.

“Es
una reforma político-jurídico-administrativa, todavía está por construirse, porque tiene que aterrizar en el aula, tiene que llegar a los maestros, y para
hacer eso es tener que mover un trasatlántico. 
Lo que vamos a realizar es una serie de acciones complementarias para
mejorar la calidad de la educación”.

Entre
las acciones que se proyectan efectuar a partir de la reforma al artículo 3 de la Constitución son  fortalecer la
currícula en materia artística, nutricional, para combatir la obesidad y
fomentar el deporte para aumentar la calidad de vida, y contrarrestar la
diabetes de tipo 2 que va en aumento.

Por
otro lado, mencionó que se deben reforzar los valores democráticos a través de
una educación ciudadana en términos de educación cívica y ética, donde los jóvenes sean capaces de elegir y debatir.

“Tenemos
que reforzar los valores y evitar que los jóvenes caigan en la tentación del
bullying, la agresión, la violencia, de la delincuencia organizada y también
del autoritarismo, porque aún es preocupante la intolerancia política porque de
ahí nació el fascismo”.

También
se tiene previsto, dijo, capacitar a profesores en el manejo de las
computadoras para abatir la brecha tecnológica e hizo incapié sobre la
importancia del aprovechamiento de los contenidos en la red.

Chatarra en las escuelas

En
cuanto a la comida chatarra y los medios de difusión que la promueven, ¿cómo cree que puedan actuar?

Mara
Robles: Yo creo que debemos de retar a las grandes industrias de alimentación
chatarra a que cambien sus contenidos, a que estén dispuestos a tener una menor
ganancia en aras de poner a disposición alimentos sanos. Yo los quiero retar a
que participen y que no pongan por delante la ganancia, sino la contribución que
puedan hacer para mejorar la salud. 

¿Cómo
pretenden afrontar el tema de infraestructura de escuelas que no cuentan con
servicios de agua ni luz?

Mara
Robles : Se acaba de firmar un convenio con el Instituto Nacional de
Infraestructura Educativa y vamos hacer un diagnóstico de todas las escuelas, y
valga la redundancia, para estar seguros de su seguridad estructural y el
gobierno del D.F. va a aportar 100 millones de pesos para que las escuelas que
estén en riesgo tengan seguridad.

Concluyó la secretaria de Educación del Gobierno del Distrito Federal.

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