[et_pb_section admin_label=»section»][et_pb_row admin_label=»row»][et_pb_column type=»4_4″][et_pb_text admin_label=»Texto» background_layout=»light» text_orientation=»left» use_border_color=»off» border_color=»#ffffff» border_style=»solid»]
Tres referentes de la caricatura en México se reúnen en este libro póstumo de Rius con un epílogo a cargo de El Fisgón
[/et_pb_text][et_pb_image admin_label=»Imagen» src=»http://testnoticias.canal22.org.mx/wp-content/uploads/2018/02/DOXSaPRUIAE4ITT.jpg» show_in_lightbox=»off» url_new_window=»off» use_overlay=»off» animation=»left» sticky=»off» align=»center» force_fullwidth=»off» always_center_on_mobile=»on» use_border_color=»off» border_color=»#ffffff» border_style=»solid»] [/et_pb_image][et_pb_text admin_label=»Texto» background_layout=»light» text_orientation=»left» text_font=»Georgia||||» text_font_size=»16″ text_text_color=»#000000″ text_line_height=»1.6em» use_border_color=»off» border_color=»#ffffff» border_style=»solid»]
Ciudad de México (N22/Irma Gallo).- RAM ha vuelto y con este libro póstumo, Rius. El libro del autor de Los agachados es un homenaje a ambos caricaturistas gracias a los buenos oficios de su colega Rafael Barajas, “El Fisgón”, y la Editorial Almadía.
“Fue un caricaturista muy importante de la década de 1950”, dice Barajas, “RAM fue sobre todo un artista de vanguardia. Deberíamos considerarlo al lado de Germán Cueto, de Mathias Goeritz, de todos esos. A ese nivel, con esa calidad de trabajo, esa calidad de vanguardia. Con una capacidad de síntesis increíble, un poder de abstracción bárbaro; hacía unos retratos fantásticos, con algunos trazos geométricos se puede reconocer al personaje.”
A pesar de la gran calidad de su trabajo, según el epílogo de “El Fisgón”, RAM se perdió en la bohemia hacia el final de su vida, y pocos lo recuerdan hoy, “me parece que es un personaje que está muy desvalorado”, al igual que el género, según dice el caricaturista. “Es decir, la caricatura finalmente sale en publicaciones que se tiran a la basura después de leídas. Entonces, el caso de RAM no es único. Por ejemplo, Ernesto García Cabral, que fue uno de los grandes caricaturistas del siglo XX y uno de los artistas más populares, no tiene lugar ni en las enciclopedias de arte mexicano ni en los museos nacionales de arte.”
Este libro, prologado por Rius y con epílogo de El Fisgón, está diseñado por Alejandro Magallanes.
[/et_pb_text][/et_pb_column][/et_pb_row][/et_pb_section]