- “Duchamp se posicionó en contra del capitalismo. Su arte se convirtió en su forma de militancia”
Por Alejandra Garduño
Distrito Federal, 17/11/15, (N22).- De Marcel Duchamp (1887-1968) se sabe que fue un artista multidisciplinario que transitó entre el impresionismo, postimpresionismo, cubismo; el arte cinético y ready-made. Sabemos también que su inclinación artística viene de la voluntad, pues jamás recibió educación formal en el campo del arte.
Es por ello que el ilustrador belga François Olislaeger decidió explicar su vida, “aquella que no se encuentra en los libros de arte” a través de la novela gráfica Marcel Duchamp, un juego entre mí y yo (Turner, 2015), en la que resalta varios aspectos intrínsecos a su vida como pintor, escultor, escritor y pensador.
El también diseñador nacido en Lieja, Bélgica, resaltó la importancia de la obra de Duchamp, como la que “abrió una puerta para pensar el arte en nuestro siglo, para romper los límites de qué es arte y qué no”, explicó el autor del libro que asemeja un códice de 6 metros de longitud. “Duchamp estuvo siempre un paso adelante, 4 golpes adelante».
El formato del libro responde al deseo del autor de “abrir de manera gráfica el campo del arte, representar de manera fiel los aspectos de su vida diaria que no se encuentran en los libros de arte, y que sólo en forma de cómic se pueden explicar”.
Comenzando por la relación con sus hermanos y sus padres, se van relatando pasajes de su vida, su incursión en el arte, y las reflexiones a las que llegaba a partir de diferentes eventualidades en su día a día.
Expuesto en blanco y negro, según Olislaeger, este cómic va haciendo referencia al amor del artista francés por el ajedrez y por el estilo funcionalista, que el artista francés -nacionalizado estadounidense en 1955- le dio a sus obras.
El formato, que busca enfocarse en el movimiento del lector, también responde a la idea de Duchamp de que “el espectador hace el arte, y le da a finalidad a la obra”.
Olislaeger ha realizado varias biografías en formato de novela gráfica y cómic, siempre en coautoría con artistas de diferentes plataformas: coreografía, teatro. Sin embargo, representar la vida de este artista surge de la admiración. “Duchamp se posicionó en contra del capitalismo. Su arte se convirtió en su forma de militancia”. De él aprendió a no identificarse con ningún grupo en específico a la hora de realizar sus ilustraciones. Alejarse de lo establecido, y responder completamente a un pensamiento personal».
De la versión en español, traída a México, a François le interesan los juegos de palabras, “el albur”, la parte revolucionaria. “La parte del artista que actúa en contra del capitalismo, cuyo capital no es dinero”, reflejada en México.
Y es justamente por eso que decidió abordar el tema ahora, y recuperar esos pensamientos del artista francés pues considera que la época que vivimos, corresponde a aquella en la que todos pueden vivir de una manera en la que el dinero no es esctrictamente necesario, permitiéndose seguir sus ideales, o valoraciones estéticas o artísticas.
«Así, es como Marcel Duchamp está y no está en ese juego entre mí y yo», concluyó François Olislaeger en entrevista para AgenciaN22.
Imágenes
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