- Es una obra que tuvo mucho éxito bajo la dirección de Edgar Muñiz y que ahora Rafael Silguero se encargará de dirigir, “esta sería la cuarta temporada de esta obra para teatro independiente, es un gusto y un honor que busquen tu trabajo”.
Por Luis Chimal
Fotos Alan de la V.
Ciudad de México, 03/05/16, (N22).- El
próximo fin de semana se estrenará la obra de teatro Reina de Carnaval, en el
Centro Cultural de la Diversidad, una historia original de Edgar Muñiz con el
que Agencia N22 pudo platicar y
conocer más de esta puesta en escena.
Esta
idea surgió a partir de “una anécdota que me contaron en Veracruz, sobre una
reina de carnaval electa que muere antes de ser coronada, era cataléptica y la
dan por muerta. Yo planteo el personaje muerto que regresa a recibir la corona. Es una obra aspiracional, la muerta que decide ser coronada para reclamar lo
que por derecho divino le corresponde y se encuentra con una mujer, dueña de la
agencia funeraria, que es muy celosa de su trabajo, entonces empiezan unas
discusiones bastante absurdas sobre quién es el merecedor de qué en la vida”
comentó Edgar Muñiz.
idea surgió a partir de “una anécdota que me contaron en Veracruz, sobre una
reina de carnaval electa que muere antes de ser coronada, era cataléptica y la
dan por muerta. Yo planteo el personaje muerto que regresa a recibir la corona. Es una obra aspiracional, la muerta que decide ser coronada para reclamar lo
que por derecho divino le corresponde y se encuentra con una mujer, dueña de la
agencia funeraria, que es muy celosa de su trabajo, entonces empiezan unas
discusiones bastante absurdas sobre quién es el merecedor de qué en la vida”
comentó Edgar Muñiz.
Al
autor le gustó la idea de plantearlo en un carnaval «por la fiesta, yo creo que
con esta obra quería celebrar la vida, sin embargo, me llama mucho la atención
la muerte y la concepción del sufrimiento a raíz de la muerte. Creo que el
sufrimiento es un aspecto adquirido no genético, no lo traemos en la sangre, lo
adquirimos a partir de la literatura. Cuando he ido a carnavales pienso en los
que están velando, pienso en los que no tienen que comer, sin embargo, toda la
fiesta sigue, es como si el mundo girara a pesar de eso”
confesó Edgar.
autor le gustó la idea de plantearlo en un carnaval «por la fiesta, yo creo que
con esta obra quería celebrar la vida, sin embargo, me llama mucho la atención
la muerte y la concepción del sufrimiento a raíz de la muerte. Creo que el
sufrimiento es un aspecto adquirido no genético, no lo traemos en la sangre, lo
adquirimos a partir de la literatura. Cuando he ido a carnavales pienso en los
que están velando, pienso en los que no tienen que comer, sin embargo, toda la
fiesta sigue, es como si el mundo girara a pesar de eso”
confesó Edgar.
Esta
obra maneja la idea de la muerte, concepción que está muy arraigada a nuestra
cultura pero que se lleva a otro nivel “se dice que el mexicano es irreverente
ante la muerte, sí lo creo. En mi obra no es una irreverencia sino que la vida
se pone encima de la muerte, no es un
asunto folclórico, es un asunto de ideología”.
obra maneja la idea de la muerte, concepción que está muy arraigada a nuestra
cultura pero que se lleva a otro nivel “se dice que el mexicano es irreverente
ante la muerte, sí lo creo. En mi obra no es una irreverencia sino que la vida
se pone encima de la muerte, no es un
asunto folclórico, es un asunto de ideología”.
No obstante, Edgar Muñiz confesó que esta idea de la muerte se vive todos los días
“en nuestro país, desafortunadamente, nos estamos acostumbrando a esta idea… Estamos acostumbrados a ver la muerte violenta a diario cuando no
deberíamos estar así. En la obra se celebra tanto la vida como la muerte”.
“en nuestro país, desafortunadamente, nos estamos acostumbrando a esta idea… Estamos acostumbrados a ver la muerte violenta a diario cuando no
deberíamos estar así. En la obra se celebra tanto la vida como la muerte”.
Es una obra que tuvo mucho éxito bajo la dirección de Edgar Muñiz y
que ahora Rafael Silguero se encargará
de dirigir, “esta sería la cuarta temporada de esta obra
para teatro independiente, es un gusto y
un honor que busquen tu trabajo”.
que ahora Rafael Silguero se encargará
de dirigir, “esta sería la cuarta temporada de esta obra
para teatro independiente, es un gusto y
un honor que busquen tu trabajo”.
Con
respecto a la dirección de Rafael Siguero y los posibles cambios que se podrían
dar, Edgar comentó: “Estoy un poco alejado del montaje, estoy al pendiente de que todos
estén contentos pero lejos del montaje, porque no quiero influir, yo fui el
director la temporada pasada y quiero sorprenderme. Realmente Rafael es un
joven talento recién egresado, es muy entusiasta y decide hacer un trabajo que
por admiración lo retomo, confió plenamente en la dirección de Rafael y la
producción de Mireya Vega y Raúl Magaña. Estoy muy
confiado y muy contento de que se reúnan los talentos a partir de un escrito
mío”.
respecto a la dirección de Rafael Siguero y los posibles cambios que se podrían
dar, Edgar comentó: “Estoy un poco alejado del montaje, estoy al pendiente de que todos
estén contentos pero lejos del montaje, porque no quiero influir, yo fui el
director la temporada pasada y quiero sorprenderme. Realmente Rafael es un
joven talento recién egresado, es muy entusiasta y decide hacer un trabajo que
por admiración lo retomo, confió plenamente en la dirección de Rafael y la
producción de Mireya Vega y Raúl Magaña. Estoy muy
confiado y muy contento de que se reúnan los talentos a partir de un escrito
mío”.
Con
esta obra el público puede esperar mucho humor negro,
cavilaciones sobre la vida y la muerte, sobre las decisiones personales que
debemos o no tomar, «siempre debemos de tomar decisiones propias pero que el
entorno no nos permite desarrollar. Esta obra trata sobre la hermandad, la
complicidad, de un humanismo muy grande y al público lo deja reflexionando a
partir de la risa, de lo absurdo, e incluso se identifican mucho con los
personajes, tiene un lenguaje colorido esto se contrapuntea y al público le
encanta esto” puntualizó Edgar Muñiz.
esta obra el público puede esperar mucho humor negro,
cavilaciones sobre la vida y la muerte, sobre las decisiones personales que
debemos o no tomar, «siempre debemos de tomar decisiones propias pero que el
entorno no nos permite desarrollar. Esta obra trata sobre la hermandad, la
complicidad, de un humanismo muy grande y al público lo deja reflexionando a
partir de la risa, de lo absurdo, e incluso se identifican mucho con los
personajes, tiene un lenguaje colorido esto se contrapuntea y al público le
encanta esto” puntualizó Edgar Muñiz.
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