Redacción/cDMX
Según una canción clásica infantil “Primero viene el amor y luego el matrimonia”. Algo con lo que muchas personas han estado de acuerdo por años, sin embargo, últimamente en Estados Unidos ha entrado en debate.
La idea de que el amor es la razón más importante para casarse o para permanecer casados esta siendo atacada por los expertos y legisladores republicanos, quienes rechazan la disponibilidad del divorcio sin culpa.
¿La razón? Cuestionan la idea de que no estar enamorado es una razón valida para poner fin a un matrimonio.
En la mayor parte de la historia de Estados Unidos el divorciarse era algo complicado.
Muchos de los estados lo tenían prohibido por completo; algunos lo tenían permitido solo en circunstancias especiales (crueldad, deserción o adulterio). Las parejas que no pudieran demostrar tales actos quedaban estancadas en el proceso.
En 1969, California se convirtió en el primer estado en permitir el divorcio sin culpa; que significa que un cónyuge podría divorciarse solamente solicitándolo, no tenían que demostrar nada.
Poco despues de que esto sucediera los demás estados siguieron el ejemplo.
Para 1977, los estados que permitían el divorcio sin culpa llegó a 47, finalmente en 1985 los 50 estados permitían este método de separación.
Sorprendentemente casi 50 años después se esta cuestionando si realmente debiera de ser valido.
Todo gracias a Steven Crowder un comentarista conservador quien en 2023, expresó su indignación e incredulidad al saber que su esposa se puede separar de él sin su consentimiento.
El tema se ha vuelto algo candente entre todos los estados republicanos. En 2024, el legislador de Oklahoma, Dusty Deevers propuso un proyecto de ley para eliminar el divorcio sin culpa, además sugirió “avergonzar públicamente” a los cónyuges que cometen culpa y luego se divorcian.
La posibilidad de divorciarse independientemente de lo que el otro quiera es parte de la esencia del divorcio sin culpa.
Hasta este punto sería bueno preguntarse ¿Qué es el matrimonio y para qué sirve?
El matrimonio es un estatus legal que confiere importantes derechos y beneficios a los casados, y estos derechos y beneficios no tienen nada que ver con el amor.
Incluso si se analiza el propósito de estas ventajas es dar a las parejas razones no amorosas para casarse.
La idea de que los beneficios sociales del matrimonio son tan significativos que incluso se justifica el incentivar el matrimonio o el pagar abiertamente para que se casen.
En gran parte de la historia de los Estados Unidos el matrimonio fue descaradamente transaccional, en esencia las leyes garantizaban que la mayoría de los hombres y mujeres se casarían, sin importar que existiera el amor.
Los historiadores se refieren al matrimonio como algo para obtener beneficios legales y económicos, algo así como “negocio matrimonial”.
A finales del siglo XIX la aceptación de la naturaleza transaccional del matrimonio comenzó a decaer y públicamente tanto hombres como mujeres empezaron a declarar que el amor era su propósito.
A pesar de la opinión pública de que el amor es la única razón para casarse, la ley adopta un enfoque más práctico, reconociendo que el amor por sí solo puede no ser suficiente para llevar a las parejas al altar.
(Con información de The Conversation)