Un comité del Parlamento Europeo votó por reforzar el borrador de una propuesta que llevará varios años para marcar límites a la IA
Redacción/CDMX
El fin de semana, la Unión Europea votó por un borrador de legislación para marcar los límites a la inteligencia artificial.
El proyecto fue propuesto por primera vez en 2021, y regirá cualquier producto o servicio que emplee un sistema de inteligencia artificial.
La ley clasificará los sistemas en cuatro niveles de riesgo, desde mínimo a inaceptable.
Las solicitudes que se consideren de más riesgo tendrán requisitos más estrictos, como presentar datos más transparentes y precisos.
De esta forma funcionará como un “sistema de gestión de riesgo para IA”, indicó Johann Laux, experto del Oxford Institute.
Uno de los principales objetivos es vigilar cualquier amenaza de las IA para la salud y la seguridad, además de proteger derechos y valores fundamentales.
De esta forma, quedaran vedados para la IA, sistemas de “puntuación social” que juzgan a la gente en función de su comportamiento o sistemas que pretenden manipular, como juguetes interactivos parlantes que fomentan un comportamiento peligroso.
Se puso énfasis en votar la prohibición de herramientas policiales predictivas, que intenten predecir quién podría cometer un delito.
Apoyaron también, la prohibición al reconocimiento facial remoto -salvo casos específicos donde se sospeche amenaza terrorista-.
El objetivo es evitar una sociedad controlada por la IA.
Así, los sistemas de IA en categorías de alto riesgo como empleo y educación, que afectan a la trayectoria vital de una persona, tendrán duros requisitos como ser transparentes con los usuarios y establecer evaluaciones de riesgo y medidas de compensación.
Un elemento que se ha añadido es documentar de forma meticulosa cualquier contenido protegido por derechos de autor empleado para enseñar a las IA a generar textos, imágenes, videos o música que parezcan una creación humana.
Lo cual permitiría a los creadores de contenido saber si sus publicaciones se han utilizado para entrenar a los algoritmos, pues de esa forma podrían reclamar si su obra ha sido copiada.
Aunque la Unión Europea no es líder en el desarrollo de inteligencias artificiales como EEUU o China, Bruselas a menudo abre camino con regulaciones que en la práctica se convierten en el estándar global.
Se plantean multas de hasta 30 millones de euros o del 6 por ciento de los ingresos anuales globales de la compañía que infrinja las normas, o en caso de las grandes tecnológicas podría ascender a miles de millones.
Será a mediados de junio cuando los legisladores de la Unión Europea voten este borrador en una sesión.
El texto pasaría después a negociaciones con los 27 estados miembros, el Parlamento y la Comisión Europea.
La autorización final se espera para final de año o principios de 2024, lo que se vería seguido por un periodo de gracia para que compañías y organizaciones se adapten a la norma, que suele tomar unos dos años.
(Con información de los Angeles Times)