Redacción/CDMX
Se calcula que en el mundo se toman 2 mil millones de taza de café al día.
Además de la cafeína, un café estilo americano contiene más de 100 ingredientes biológicamente activos, además de la cafeína.
Los efectos de esta bebida pueden comenzar incluso antes de tomar el primer sorbo, pues solo inhalar el aroma del café puede mejora la memoria y estimular el estado de alerta según un estudio de 2019.
Otro estudio de 2018, encontró que a personas que lo consumieron tuvieron un mejor desempeño en pruebas de razonamiento analítico después de una buena bocanada de su aroma.
Aunque el análisis advirtió de la posibilidad de que fuera una efecto placebo, con la expectativa de de tener un mejor rendimiento.
Aunque los efectos de una taza de café se manifiestan después de tan solo 10 minutos, la concentración máxima de cafeína en la sangre se produjo después de 45 minutos.
La cafeína actúa como un estimulante del sistema nervioso central, que pone a una persona más alerta y concentrado perp potencialmente también más irritable y ansioso.
Todo tiene que ver con los receptores de adenosina de su cuerpo, que ayudan a regular la frecuencia cardiaca, el flujo sanguíneo y los ciclos de sueño y vigilia.
Cuando la adenosina (compuesto orgánico que se produce naturalmente ene le cuerpo) se une a estos receptores, desencadena respuestas fisiológicas que conducen a una disminución de la actividad celular, lo que ha menudo promueve la somnolencia y el sueño,
Pero la cafeína puede engañar a las células nerviosas y unirse a ellas, y de esa forma evita que la adenosina haga su trabajo.
Esto promueve un mayor estado de alerta, al mismo tiempo que permite que los neurotransmisores estimulantes del cerebro (como la dopamina) se disparen.
Esto lo convierte en un estimulante del estado de ánimo para muchas personas pero también puede provocar ansiedad después de altas dosis.
Un estudio de 2020 encontró que el café mejoró el rendimiento en un promedio de 1.7 por ciento en un ciclista.
Además, otra investigación señala que existe una mejora relacionada con la dosis en las pruebas de tiempo de reacción, memoria y razonamiento visoespacial entre los bebedores de café.
Aunque un análisis del grupo de consumidores Wich? Encontró que un capuchino mediano en la cafetería Costa contiene 325 mg de cafeína, mientras que el equivalente de Starbucks tiene solo 66 mg.
Sin embargo, un análisis e 2003 halló diferentes concentraciones de cafeína que va de los 259 a 564 mg por porción en el mismo tipo de bebida obtenida en el mismo punto de venta, durante seis días consecutivos.
En ese sentido los granos pueden ser la diferencia, pues los granos robusta tienen más cafeína que los arábica.
Y, los tuestes más oscuros tendrán un contenido de cafeína más bajo.
Por ello, aunque los puntos de venta intentan controlar los granos y el método de preparación la variabilidad de cafeína es bastante alta.
El consumo, de acuerdo a un estudio de más de 200 matanálisis en 2016 indicó que entre tres o cuatro tazas al día se puede decir que beneficia a la salud antes que ser perjudicial.
En lo que respecta al consumo de café en la reducción de riesgo de depresión, se ha encontrado que oras bebidas que contienen cafeína, no lograban el mismo efecto y se cree que es debido a los antioxidantes que contiene.
El café filtrado a través de papel resulta más saludable que el hecho en filtro de metal, pues un estudio encontró que las sustancias en esta bebida que pueden elevar el colesterol “malo” pueden eliminarse mediante el filtro.
(Con información de The Guardian)