Redacción/CDMX
Al igual que los humanos, los peces necesitan oxígeno para sobrevivir.
Los humanos y los animales terrestres obtienen el oxígeno del aire a través de sus pulmones, los peces en cambio lo reciben mediante sus branquias.
Las branquias filtran el oxígeno del mar o del agua dulce.
Así que, ahogarse significa que no ingresa oxígeno al cuerpo, los humanos podemos sobrevivir a un ahogamiento si eliminamos el agua de los pulmones (en caso de caer al agua) y les devolvemos el oxígeno.
Con los peces, ocurre lo contrario, pues se asfixian después de un tiempo si terminan en tierra.
Sin embargo, los peces pueden ahogarse en el agua también, aunque quizá no sea correcto decir que se ahogan, ya que no les entra agua en los pulmones como a los mamíferos.
Es correcto decir que los peces se asfixian.
Cuando se asfixian, no obtienen suficiente oxígeno a través de sus branquias, es decir no pueden obtener oxígeno del agua.
Esto puede suceder si hay poco oxígeno en el agua, cuando está muy contaminada o si está muy caliente.
Los peces tropicales pueden extraer oxígeno del agua mejor que un pez de agua fría.
Hay especies como el salmón, que puede tomar el aire de la superficie para llenar su vejiga natatoria para evitar hundirse, pero también pueden usar el oxígeno del aire de la misma manera, como una especie de tanque de reserva.
Las anguilas pueden absorber oxígeno a través de la piel.
El tiburón blanco tiene que nadar todo el tiempo para evitar la asfixia, pues debe nadar todo el tiempo para sus branquias absorban exigeno del agua en movimiento, incluso deben nadar cuando están durmiendo.
También los hay como el pez pulmonado africano que cuenta con branquias y pulmones que pueden enterrarse en el barro durante sequías, y salir a respirar aire.
(Con información de sciencenorway.no)