A pesar de ser un proceso natural, la transpiración puede provocar incomodidad
Redacción/CDMX
El sudor es asociado con el mal olor y falta de higiene, pero esta no afecta a la cantidad de sudor que produce una persona, así como tampoco condiciona su aroma.
Sudar es vital para el ser humano “La primera y principal es la termorregulación, es decir, el control de la temperatura corporal. Tiene una función emocional, una función excretora para eliminar los productos de desecho que se producen del metabolismo corporal”, detalla Nuria Rodríguez Garijo, dermatóloga de la Clínica Universidad de Navarra.
La temperatura media del cuerpo es de 36-37 grados, aunque se incrementa cuando se realiza ejercicio físico.
También puede aumentar cuando suben las temperaturas ambientales; el exceso de peso puede influir o también el consumo de algunos alimentos, como los picantes.
El aumento de temperatura es detectada por el hipotálamo que es el centro de la termorregulación del cerebro, que envía mensajes a través de las neuronas hasta las glándulas sudoríparas para que produzcan sudor.
El sudor en la superficie de la piel se evapora y es lo que enfría al cuerpo.
¿Cuál es la temperatura a la que se dispara el sistema refrigerante?
Dependerá de la persona, pues no se conoce, hasta el momento, una temperatura a partir de la cual se active “hay gente que ante la misma circunstancia suda más y otra que suda menso, es una cuestión de genética”, afirma Paloma Borregón, dermatóloga de la Academia Española y Veneralogía.
Pero los extremos siempre serán inconvenientes, tanto los que sudan mucho, que corren riesgo de deshidratarse, como quienes sudan poco, que tienen más posibilidades de sufrir un golpe de calor, al tener anulado el sistema de enfriamiento.
Aunque sudar poco, por lo regular no se considera una patología, pero sudar en exceso sí puede serlo. Se trata de la hiperhidrosis, que por lo regular afecta a manos, pies, axilas o cara y puede afectar hasta el 3% de la población.
¿A qué huele el sudor?
El sudor es 99% agua con desechos del metabolismo, minerales como sodio, cloro, potasio o urea, pero básicamente es agua con cloruro de sodio, por lo que no huele a nada, sin embargo, lo que provoca el mal olor es la microbiota, es decir, la flora endógena de la piel.
“Son bacterias, hongos, hasta parásitos que se distribuyen de manera distinta. En las axilas tenemos unas bacterias diferentes de las que tenemos en la cara o en otros sitios, por eso el olor de unas zonas es diferente al de otras”, señala la doctora Borregón.
El olor también puede alterarse por la ingesta de medicamentos, o por la edad.
(Con información de El Mundo)