La autora mexicana ha obtenido el Premio Alfonso Reyes por la novela El invencible verano de Liliana; aquí te presentamos tres novelas más para adentrarnos un poco más en su obra
Ana León/Ciudad de México
Durante 2020 y 2021 la hemos visto en diferentes conversatorios por zoom, charlas, presentando obras de otras autoras, presentando las propias; dando entrevistas por su novela más reciente, por sus trabajos de investigación. Cristina Rivera Garza es una de las autoras más prolíficas y reconocidas en la narrativa mexicana. Nacida en la frontera noreste de México, en Matamoros, en el año de 1964, la autora de Ningún reloj cuenta eso, ha obtenido el Premio Alfonso Reyes por su novela El invencible verano de Liliana. Un relato tremendamente íntimo y contundente que da cuenta del feminicidio de su hermana menor Liliana Rivera Garza.
Treinta años le tomó a la escritora mexicana enunciar en voz alta el feminicidio de su hermana Liliana Rivera Garza. Con este libro la autora rompió ese silencio y se habló a sí misma en voz alta. Nos habló en voz alta de la vida de una joven mujer llena de contradicciones, incongruencias, brillos, inteligencia y sueños de futuro. Es la voz de la propia Liliana a través de las cartas que tanto le gustaba escribir como se nos va revelando y es también a partir de testimonios de los entonces jóvenes estudiantes y amigos que compartieron la vida con ella como se va reconstruyendo poco a poco ante nuestra mirada.
En palabras del jurado que le otorgó el Premio Nuevo León Alfonso Reyes 2021, esta obra «cuestiona las estructuras tanto del lenguaje como de la sociedad, y vuelve maleable la memoria desde la perspectiva familiar, de registro comunitario e histórico».
En su tercera edición —la primera la ganó la escritora Margo Glantz y la segunda la teórica Donna Haraway— el Premio Nuevo León Alfonso Reyes es convocado por el Gobierno del estado, a través del CONARTE y la Secretaría de Cultura, y por las instituciones académicas U-Erre, el Tecnológico de Monterrey, la Universidad de Monterrey (UDEM) y la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL).
Para entrar a ese universo particularísimo que construye la autora en sus novelas —porque su oficio en la escritura transita también el ensayo, el cuento y la poesía—, además de la novela que le ha dado este premio, te recomendamos tres títulos.
Verde Shanghai
Tras un accidente, la protagonista de este libro abandona una vida anodina y la narración se bifurca entre la persona que es y su alterego. Ambas personalidades contratantes nos llevan por los fragmentos de memoria de una historia y de una vida que es investigada por la misma protagonista y que revelará el secreto de su alterego. Una novela extraña y de la que a se habla poco en la trayectoria de la escritora.
Nadie me verá llorar
La Castañeda, la Ciudad de México y la memoria de vidas borradas por el ruido exterior, temas que ha abordado la autora en otras novelas, convergen en ésta cuando el fotógrafo de 49 años Joaquín Buitrago se obsesiona con la historia de una de las enfermas que tiene que fotografiar, Matilda Burgos y, además, se enamorarse de ella. La novela se desarrolla en medio de toda esa memoria en la que empieza a tomar forma la historia de Burgos.
La muerte me da (en pleno sexo)
El verso de la poeta argentina Alejandra Pizarnik, que en esta edición de aniversario aparece completo, aunque entre paréntesis, da título a una novela fragmentada que nació frente a ese incremento en las noticias de muchachas asesinadas y mientras nos acostumbrábamos a «los modos espectaculares de la necropolítica», como señala la autora en el prólogo de esta edición. «La indiferencia es una disciplina atroz. Había cuerpos de mujeres por todos lados. Cuerpos destrozados. Todos voltéabamos la vista a Ciudad Juárez, en la frontera entre México y Estados Unidos, pero todos sabíamos de alguien que conocía a alguien que había perdido a alguien. todos perdíamos. Todos seguíamos perdiendo.
»¿Y si toda esa violencia ocurriera en el cuerpo masculino?», se cuestiona Rivera Garza. De ese cuestionamiento surge esta narración acerca «de los cortes —materiales y simbólicos— que cercenan los cuerpos. Nuestro cuerpos. »
En cada una de estas novelas habita Liliana Rivera Garza en un sencillo «A lrg».
Imagen de portada tomada: EP