El cineasta Sergio Olhovich, su hija Tania Olhovich y el crítico de cine, Sergio Huidobro, participan en este encuentro en el marco la segunda edición del Russian Film Festival
César H. Meléndez / Ciudad de México
En el marco de la segunda edición del Russian Film Festival en nuestro país, se transmite un encuentro con el cineasta Sergio Olhovich, uno de los grandes referentes nacionales del cine social y un puente cultural ineludible entre México y Rusia. La charla con el director, quien estará acompañado por su hija, la actriz Tania Olhovich, nos llevará a hacer un recuento de la historia del cine soviético hasta nuestros días.
«Actualmente el cien ruso está viviendo una transformación a medida que Rusia se va transformando otra vez y va desechando el neoliberalismo paulatinamente. Y se está orientando hacia un nuevo tipo de sociedad que no sabemos bien hacia dónde va. Se está haciendo paralelamente un cine de temática social y de compromiso, y paralelamente un cine netamente comercial, igual que aquí en México», señaló Sergio Olhovich, cineasta.
El maestro Olhovich reconoce que ha perdido contacto con el cine ruso contemporáneo, pero gracias a iniciativas como el Russian Film Festival es que ha podido tomarle el pulso a la actualidad fílmica de ese país. Desde su punto de vista, México y Rusia se encuentran transitando caminos paralelos, y eso se ve reflejado en sus industrias cinematográficas.
«Rusia y México llevan dos desarrollos paralelos en ese sentido, repito. En México la 4T, la política del gobierno actual, y en Rusia lo que llaman la nueva Rusia y las políticas del presidente Putin que cada día son más radicales hacia la izquierda. El cine debería cooperar para eso que está sucediendo cotidianamente en México y en Rusia, y en todo el mundo. Por lo tanto el cine moderno actual debería mirar hacia las coproducciones y hacia nuevas relaciones de producción, de temáticas que unan a nuestros pueblos. O sea, coproducir con Rusia, pero también coproducir con Italia, con Francia, con Estados Unidos, y con el resto del mundo.»
Durante todo el siglo veinte sólo se filmaron cuatro coproducciones cinematográficas entre Rusia y México, dos de ellas fueron dirigidas por Sergio Olhovich. Nos referimos a la multigalardonada Esperanza, considerada su obra más lograda y personal, y a la película de 1999, En un claroscuro de la Luna.
«Si hay alguien en el mundo entero que puede hacer una coproducción correctamente entre Rusia y México, soy yo. No hay otro mexicano que pueda hacerlo. No hay otro ruso que pueda hacerlo. Yo viví ocho años en la unión soviética estudiando la carrera de cine, entiendo la esencia rusa, además de que mi padre era ruso y desde niño bebí la cultura rusa, la música, la literatura.»
A finales de este mes el director iniciará la producción de una película largamente acariciada, que estará centrada en la expropiación petrolera.
«Estoy haciendo una película que es netamente social y política, pero ese soy yo. Hago yo ese tipo de cine desde que hice mi primera película. Todavía faltan más películas que hablen del día de hoy.»
El Encuentro con Sergio Olhovich podrá seguirse en directo a partir de las cuatro de la tarde en el Facebook del Russian Film Festival y de Canal 22.
Imagen de portada: Revista Purgante / © Carlos Ramos Mamahua