En México, las cifras señalan que en 2019 el total de estudiantes ascendió a 36.6 millones, la planta docente a 2.1 millones, en más de 265 mil escuelas
Ciudad de México (N22/Redacción).- Cada 24 de enero se celebra el Día Internacional de la Educación, una fecha proclamada por la Asamblea de las Naciones Unidas con el objetivo de concientizar a todo el planeta de la importancia de la educación para conseguir los Objetivos de Desarrollo Sostenible; el objetivo número cuatro establece una Educación de Calidad.
La Asamblea General mencionó en un informe que, en la actualidad, 262 millones de niños y jóvenes siguen sin estar escolarizados, 617 millones de niños y adolescentes no pueden leer ni manejan los rudimentos del cálculo; menos del cuarenta por ciento de las niñas del África Subsahariana completan los estudios de secundaria baja y unos 4 millones de niñ@s y jóvenes refugiados no pueden asistir a la escuela.
En México, las cifras señalan que en 2019 el total de estudiantes ascendió a 36.6 millones, la planta docente a 2.1 millones, en más de 265 mil escuelas. Por cobertura pública, el porcentaje ascendió a 85.5 y el privado, a 14.5. Los niveles escolares se conforman en educación básica por el 69.6%; 14.3%, educación media superior (EMS); 10.8%, superior; y 5.3% capacitación para el trabajo.
Sin duda, se han registrado avances en materia educativa, pero aún están pendientes aspectos fundamentales que muestran que hay sectores de la población que ven limitado su derecho a la educación.
En materia presupuestal, la Unesco ha señalado que los países de América Latina deberían invertir, al menos, el 6% de su Producto Interno Bruto (PIB). En México, el Artículo 119 de la Ley General de Educación establece no menos del 8% del PIB. Al cierre de 2019, según las cifras preliminares, se gastaron mil 453.5 millones de pesos en educación, cifra que representó el 6% del PIB.
Detrás de todo el dinero invertido en el país, se debe tomar en cuenta que es necesario que exista una buena calidad de la educación. México participa desde el año 2000 en la prueba PISA (Programa para la Evaluación Internacional de Estudiantes), estudio que permite conocer el avance o rezago de las políticas educativas en diversos países a través de tres pruebas principales: lectura, matemáticas y ciencias.
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), evaluó a un total de un millón 480 mil 904 estudiantes mexicanos en 2018, y a finales del año pasado se dieron a conocer los resultados. Sólo 1% de los estudiantes mexicanos mostró habilidades avanzadas en lectura, en done pudieron comprender textos largos. Lo que demuestra que, aunque la matrícula de alumnos ha aumentado, el país se sigue manteniendo en los niveles más bajos en términos de aprendizaje. Según el estudio, México obtuvo un rendimiento de 420 puntos en lectura, 409 en matemáticas y 419 en ciencias. En los mismos rubros, el promedio de la OCDE se ubicó en 487, 489 y 489 respectivamente, por lo que México se ubicó por debajo del promedio.
En comparación con la última prueba PISA del 2015, el rendimiento promedio de los estudiantes mexicanos que son evaluados en la prueba de la OCDE, bajó tres puntos en lectura, subió uno en matemáticas y subió tres en ciencias.
Lo que hace cuestionarse, ¿qué es lo que esta pasando con la educación en el país?, ¿qué tipo de preparación se le está dando a los futuros profesores? y, sobre todo, ¿qué medidas se están implementando para mejorar?
El día de hoy, el secretario de Educación, Esteban Moctezuma Barragán, dio un mensaje a través de vídeo que compartió en sus redes sociales, en el cual llamó a trabajar por «una educación que cultive la mente y llene el corazón». El titular de la Secretaría de Educación señaló que este plan forma parte de los objetivos de la agenda 2030 asumidos por México.
El titular de la SEP subraya que la Educación en México debe buscar que haya personas capaces y productivas, pero también solidarias con los demás. Al final del video, hizo un llamado para celebrar el Día de la Educación y a hacer «aunque sea un poquito, por la educación de alguien», y pide enseñar con el ejemplo, «porque el simple ejemplo es un hecho educativo, así que todos podemos contribuir».
Imagen: Unicef