Dentro de las áreas nuevas de Talent Land se encuentra AgroLand, un espacio que expone propuestas de tecnología aplicada al campo
Guadalajara (N22/Alizbeth Mercado).- Los drones no son solo para tomar fotos. También pueden tener utilidad en el sector agrícola e indicar el estado de un cultivo. La información obtenida de las imágenes que da un dron sobre una plantación ayudan a optimizar los procesos, ya que brindan información que no es perceptible “al ojo humano”. Fernando Larios, director de Laser y GPS (y ponente en Talent Land) la llama «Agricultura de precisión».
«Siempre tuve la curiosidad de hacerle ver a la gente que el cultivo es variable pero no lo pueden medir, entonces pensé: ¿cómo hacer que la gente entienda eso?, porque si no lo pueden medir sería muy difícil que pudiera invertir en sistemas de tecnología. El dron es un puente, una herramienta, para que las personas entiendan y puedan usar la información para tomar decisiones, porque antes era muy difícil.»
Esta herramienta no es exclusiva de los agricultores, los asesores agrícolas pueden utilizarlas y toda la información se guarda en la nube; Laser y GPS no almacenan los datos sino que se quedan en el usuario que pide la consulta. Uno de los usos más recurrentes que tienen es detectar el tipo de suelo que se tiene para saber cómo trabajarlos.
Los drones que utilizan no son iguales a los que vemos volar por los aires de la ciudad en busca de la mejor postal, los que se utilizan en la agricultura necesitan un sensor especial, una cámara de dron “normal” es RGB, que solo tiene una banda roja, verde y azul; la de los drones agrícolas cuentan con tecnología infrarroja y sensores térmicos que se requieren para tomar imágenes no perceptibles, sino regiones.
El tipo de dron que utilizan está equipado con un sensor multiespectral, Parrot Sequoia, cámara multiespectral que captura cuatro bandas espectrales en luz visible y luz infrarroja no visible para analizar la salud de los cultivos. Esto puede detectar qué zonas del cultivo no están regadas y por eso la producción es irregular.
Esta tecnología, de acuerdo con Larios, no tiene que ver con la capacidad de producción del agricultor, sino del tipo de cultivo «por ejemplo, los ingenios azucareros manejan muchas hectáreas pero son agricultores ‘pequeños’, pero sí demandan la tecnología. Las hortalizas son menos demandantes de la tecnología porque los ciclos son más rápidos y los cultivos bajitos, los cultivos altos, de difícil acceso, son los que muchas veces demandan esta herramienta para poder verlos.»
El sector agrícola en el país tiene dificultades y quizás brechas económicas y digitales ¿cómo paliarlas? «Estamos seguros que lo que acorta la brecha son programas de gobierno que realmente vayan enfocados al beneficio del agricultor, que se lleve la tecnología a niveles donde los agricultores no podrían llevarla por sí solos. El esfuerzo que hacemos, que hacen entidades educativas, queda limitado hasta que el gobierno lleva el beneficio.»
Para Larios, antes había “extremos”, por un lado la necesidad y por el otro la tecnología. El valor que tiene esta información en el sector depende de la necesidad de los agricultores, las imágenes de drones también cortan las brechas, porque es información nueva que puede potenciar las posibilidades de los cultivos.
Sin embargo, para aplicar la tecnología hay dificultades en cuanto a los usuarios y su adaptación, «hay agricultores que aprendieron todo en el campo, todo a mano,que no usan tecnología y es muy difícil, todos usamos smartphone, el avance de la tecnología en medios como el de la comunicación, ha hecho que las personas entiendan y crean en esto. Las nuevas generaciones han facilitado que las personas mayores se interesen en adquirirla. Ningún agricultor dude que hay beneficios de la inversión en sus cultivos.»
Hasta el momento, el equipo de Larios ha evaluado 13 mil 500 hectáreas al año.
Portada: Mapeado del terreno 3D