Elisa Miller frente al reto “Temporada de Huracanes”

Hace poco se anunció que la cineasta mexicana sería la encargada de traducir al lenguaje cinematográfico la potencia narrativa de Fernanda Melchor, autora de esta novela que descolocó a más de uno; la fusión promete

 

Ciudad de México (N22/Ana León).- La lectura de Temporada de huracanes es una lectura sin tregua. Fernanda Melchor (Veracruz, 1982), su autora, no siente ningún temor al desafiar al lector. Los narradores se suceden capítulo a capítulo, las voces cambian, la mente de cada personajes es desentrañada por ese observador omnipresente que, sin embargo, no revela todo. La narración es un bombardeo contínuo de información que hipnotiza.

La historia: un crimen. Un cadáver que aparece en un canal de riego, el cuerpo de la Bruja, una mujer temida y respetada por su comunidad. Luego, la búsqueda. Un testigo que vio salir a un grupo de muchachos de la casa de esta mujer cargando un cuerpo. Después, cada uno de los involucrados narrará su historia. Página a página, Melchor nos presenta lo más extremo de la condición humana, lo atroz, en un contexto donde la pobreza y la violencia extrema (una narración que no nos es ajena como país) llevan al límite a cada uno de los personajes de esta novela que se publicó en 2017 y que no es la primera de la autora, en 2013 publicó Falsa liebre; ese mismo año también publicó el libro de crónicas Aquí no es Miami, que se reeditó el año pasado.  

Esa sordidez caracteriza la narrativa de autoras contemporáneas a Melchor y no sólo de autoras sino también de cineastas, una de ellas es Elisa Miller y es justo ella quien tendrá la tarea de llevar al cine esta novela de la que la productora Woo Films ya tiene los derechos. “Estamos proyectando filmar en 2020, probablemente mediados, finales, porque así son los tiempos del cine, muy lentos, pero también para tomarnos el tiempo necesario para la adaptación y para el desarrollo y para el financiamiento, como para 2021 tener la película”, me cuenta justamente Miller con quien platiqué en días pasados sobre este proyecto que está iniciando.

Es la misma Elisa la que me dice que también es sórdida, o mejor dicho, que le sale muy bien lo sórdido y es justo eso lo que le atrajo del libro de Fernanda a quien conoció poco después de que se firmara el contrato para filmar la película.

“Algo que me fascinó del libro de Fernanda es que es unisex, no tiene esta cosa de libro femenino. Si tú lees ese libro y nada más dice Melchor sin Fernanda nunca se te haría que lo escribió una mujer. ¡Qué horrible!, pero justo el prejuicio este de que las mujeres hacemos ‘cosas femeninas’ en Temporada… se quita por completo. Es un libro sin género.”

Esta será la primera vez que Elisa Miller llevará una novela a la pantalla. A este proyecto lo preceden largometrajes como la antes mencionada, Vete más lejos, Alicia (2010), una cinta bastante íntima con tintes biográficos; los cortos Del otro lado del mar (1994), Ver llover (2006), con el que ganó la Palma de Oro en el Festival de Cannes, Roma (2008), que fue premiado con un Ariel; y los documentales About Sarah (2014), sobre la artista Sarah Lucas, y El regreso del muerto (2015).

Sobre los detalles de la adaptación de la novela de Melchor al cine, Elisa Miller nos habló en la siguiente entrevista.

La escritura de Fernanda evoca muchas imágenes, muchas de las páginas son como un plano secuencia, ¿a ti como cineasta qué te atrajo de este libro?

Leí  Temporada de huracanes y me fascinó. Me pareció el mejor libro y la mejor escritora de mi generación, porque además somos, casualmente, del mismo año (1982). Leí y decía: “es que lo vi, vi una película”, fuertísima, pero la vi. Y en especial el narrador, el tipo de narrador que usa me pareció algo extraordinario, realmente cada capítulo es como si lo dictara un personaje distinto, pero más que eso, como si te metieras en la cabeza de cada uno de ellos y además simpatizaras con todos. Como que los entiendes a todos aunque sean personajes bastante siniestros algunos de ellos, bastante oscuros. El ejercicio de meterse así a su cabeza… yo le oí a ella decir en una entrevista, que era como un narrador exorcista, que se mete y se parece más a escuchar los secretos de alguien, como acompañar a alguien en su mente. No es un narrador normal, no te lo está platicando. Y además es súper visual.

Fue a partir del entusiasmo por el libro y de encontrar un libro que profundiza de una manera que yo no había visto en temas tan escabrosos. Este libro se toma el tiempo de contarte todas las historias al arrancar con el encuentro del cadáver de la Bruja. Y logra entender a cada uno de los personajes de alguna forma. Eso me pareció brillante, porque finalmente habla de la humanidad, de lo que somos capaces todos. Eso y una realidad de México horrorosa, pero la manera en que lo cuenta y lo aborda, yo no había leído algo así. Y esto de la empatía, porque son personajes que están muy alejados de mi realidad y de la de Fernanda, y sin embargo los llegas a conocer y a entender profundamente, y eso me parece un acierto relevante.

Algo que me fascinó del libro de Fernanda es que es unisex, no tiene esta cosa de libro femenino. Si tú lees ese libro y nada más dice Melchor sin Fernanda, nunca se te haría que lo escribió una mujer. ¡Qué horrible!, pero justo el prejuicio este de que las mujeres hacemos “cosas femeninas”, en Temporada… se quita por completo. Es un libro sin género. Y bueno, a mí los productores me decían “a ti te sale muy bien lo sórdido”, por mi última película de El placer es mío (2015), que digamos no es un contexto tan sórdido.

Cuán complejo puede ser lograr llevar este libro a la pantalla. Lo pregunto porque haces una primera lectura como lectora, también como escritora porque tu formación también es en letras y luego como cineasta. Son tres lecturas.

Ahorita apenas estamos arrancando el proceso de escritura. Al terminar mi primera lectura dije, “¡me encantó!”. Luego se los llevé a mis productores de Woo [Films] y les dije: -esto sería un peliculón, pero entre que todos los socios lo leyeron y buscaron a Fernanda, pasó un rato. Y ya, cuando la noticia de que ya habían adquirido los derechos, releí con vista de hacer una película y me di cuenta de que era un reto enorme, porque como te decía, para mí el gran acierto de la novela es el narrador, o sea, es la literatura, juega con la palabra de una manera increíble. Y hacer un guion justo es desnudar de la literatura esa gran novela. Ese tipo de cosas que en la literatura corre muy bien, para pasarlo al cine es súper difícil. Ahorita con la coguionista con la que trabajo es preguntarnos todo el tiempo: ¿cómo contamos esto?, ¿cómo incluimos esta información de una manera cinematográfica? Ese es el paso más difícil para este proyecto.

¿Conoces a Fernanda de antes? Ya sea que sí o que no, como directora ¿cuál es la distancia que debes tomar de la obra y de la autora al momento de bajar toda esta información de la que me estabas hablando y de empezar a filmar?

A Fernanda la conocí apenas. Tenemos amigos en común que fue lo que ayudó a que ella conociera mi trabajo y supiera de mí aparte del deal de producción. Yo la conocí el día que se había cerrado el trato para hacer la película. En un inicio quería que ella estuviera en la mesa de escritores del guion. Después los productores me hicieron entrar en razón y también entendí que no, que justo por lo que te decía, como vamos a desnudar de literatura su novela, iba a ser muy rudo para ella estar en esa cirugía. A mí me pasa igual, yo amo el libro como libro y a la hora de estar haciendo esta traducción a cine, hay cosas que me duele perder. Es justo hacer el ejercicio de quitar información y de ver qué es lo que puede pasar a cine. Acuñé un término para definir qué es lo que estamos haciendo: la extracción. Trato de extraer lo cinematográfico del libro: ¿qué podemos filmar?, ¿qué no podemos filmar?, y eso que no se puede, ¿cómo lo incluimos en la película?

Cuando nos conocimos después de que se había firmado la compra de los derechos, ella me dio su voto de confianza, había visto El placer es mío, y le gustaba como filmo. Siento que al ella darme como “su bendición”, así lo sentí cuando nos encontramos, me dio mucha libertad. Y me dijo eso: “este es mi libro, tú haz tu película”.

¿Cuánto tiempo tienes previsto para la escritura del guion? ¿Será una versión literal o sólo una adaptación?

Estamos en un proceso un poco verde para contestarte. Por ahora estamos haciendo esta extracción de lo cinematográfico y probando. Aún no sabemos cómo va a ser. Tenemos un tiempo razonable para hacerlo, los productores están conscientes que es un proceso difícil y nos están dando el chance de hacerlo a conciencia y ver qué es lo que funciona. A nivel estructura de la película, por ahora estamos respetando la estructura del libro, porque además es de las cosas que más me gusta. Lo capitular, que cada vez cambia de punto de vista. Que son las cosas que también me parecen muy interesantes para llevar al cine, justamente el cambio de puntos de vista, el tiempo narrativo que usa Fernanda. Son tiempos como que se cruzan, que se encuentran, pero tampoco es el choque de Amores perros donde todos se encuentran, es un tiempo que vas bordando en diferentes momentos.

Ya cuando estás haciendo esta segunda lectura más a detalle, ¿empiezas a pensar en imágenes, en encuadres, en los matices? Leía a Fernanda en una entrevista definiendo su obra como una historia sórdida, demencial y carnavalesca.

Me encanta. Sí, está esta presencia del carnaval de Veracruz que aunque en el libro no se ahonda, muchas veces te das cuenta que está sucediendo el carnaval, sobre todo en el capítulo de Brando, que es el que más pistas te da, que más detalles del asesinato te da. La información que había faltado, Brando, que es el penúltimo capítulo, es en el que te das cuenta que está sucediendo el carnaval. También me siento como una investigadora privada, la investigadora privada del asesinato. Además en una primera, e incluso una segunda lectura, no había registrado que sucede todo en un fin de semana. Es el 1ro de mayo cuando encuentran a la Bruja. Ahorita estamos justo de investigadoras privadas.

¿Cuáles son los pros y los contras de llevar un libro al cine?

Esta es la primera vez que yo lo hago, que adapto un libro para cine. Pero es como te decía, a mí como lectora el libro me fascina y a veces siento que es tan bueno que va a ser súper difícil. Pero a la vez es como tener una guía, de escribir un guion de cero, de pronto escribes un argumento con toda la historia y aquí ya tienes eso, el libreto que aunque lo tengas que modificar, ya sabes cuál es el principio y cuál es el final. Ya te sugiere una estructura, una serie de imágenes poderosísimas. Entonces yo creo que vas, por un lado, en ventaja, respecto a escribir de cero; por otro, es el reto de, justamente, quitarle lo literario, lo infilmable y cómo traducirlo a una secuencia cinematográfica.

 

Imagen: Imcine