El miedo es una herramienta utilizada por el Estado, por la política, que lleva a falsas soluciones, a que personajes como Trump lleguen al poder
Oaxaca (N22/Perla Velázquez).- Para Gilles Lipovetsky la era de la hipermodernidad, época en la que vivimos, está marcada por no tener utopías. La individualidad con la que nos manejamos rompió con la comunidad y con las ideologías. Este hecho afectó la relación del ciudadano con los partidos políticos.
“La hipermodernidad coincide con el regreso del Estado. Cuando pensamos el Estado, por ejemplo, durante la Revolución francesa, la política era el centro; era el Estado, la política, quienes tenían la misión de cambiar el mundo. Ahora, todo eso no tiene mucho sentido. Los Estados son débiles”, dice el filósofo y sociólgo francés en una entrevista durante su visita a la FIL Oaxaca.
Lipovetsky asegura que estos cambios han generado desconfianza en las instituciones. La mezcla entre el capitalismo y la política provocó que ahora no se hable de “La era del vacío” sino de “La era de la inseguridad”, porque los ciudadanos vivimos con incertidumbres que ha propiciado el Estado.
“La justicia y el Estado están aquí para garantizar la seguridad física y la defensa de las fronteras, y todas las otras cosas hay que dejarlas al mercado. Esa es una posición radical, yo no la comparto, porque tenemos la experiencia de que cuando las fuerzas del mercado están ilimitadas, se crean sociedades hiperdesiguales. […] Ahora no hay falta de comida, no hay epidemias, enfermedades, pero hay inseguridad social, la gente no sabe lo que va a pasar, tiene miedo. Es aquí en donde el Estado debe tener un papel importante porque si el Estado no interviene, no actúa, entonces el juego está abierto.”
Lipovetsky dice que la política es quien debe regresarle la confianza a la gente, porque el capitalismo ha triunfado, pues su tarea ha buscado el enriquecimiento de ciertas clases sociales. Ahora le toca al Estado romper con las desigualdades que se han creado a causa de éste y que han permitido cambios en la estructura política.
“Trump fue elegido por gente que tenía miedo, porque se pensó que los mexicanos iban a quitarles su trabajo, su espacio; él hizo su juego con esos miedos. En todos esos casos es siempre la inseguridad; los ciudadanos llaman a un cierto tipo de salvador contra los inmigrantes, contra la mundialización, y que llevan a falsas soluciones. […] Hay gente que acepta muy bien la idea de que la democracia no es tan importante, quieren seguridad. Eso es muy peligroso, obviamente, si no escuchamos este crecimiento del sentimiento de seguridad, hay amenazas. Las democracias van bien, pero hay que escuchar esas amenazas que crecen.”