Topos, grupos con conciencia social ignorada

Por Alizbeth Mercado
(@alizbeat)

CIUDAD
DE MÉXICO, México, 19/02/13, (N22).- “En
la naturaleza humana sí hay una tendencia a la solidaridad, si no hay
respuesta de quien tiene el poder y los medios económicos, la gente responde
para sobrevivir”, opinó Roberto Bermúdez Sánchez, doctor en sociología UNAM.

Este comentario viene a
propósito de las acciones emprendidas por el grupo Topos, durante el estallido
en el edificio B2 de Pemex, quienes apoyaron en las labores de rescate junto a
Protección Civil y el ejército.

El grupo surgió en 1985 a
razón del sismo del 19 de septiembre; los jóvenes trataron de ayudar en forma
espontánea a la población que lo requería. La asociación se formalizó en marzo
de 1986, porque la ciudad continúo con temblores y se necesitaba un grupo con
organización. “Todos somos voluntarios, nadie recibe beneficio económico, la
brigada consigue donativos y compra las herramientas y solventamos los viáticos”,
comentó para Agencia N22, Fernando Álvarez, contacto del grupo.

La organización que el grupo
ha adquirido en el transcurso de los años se consolidó gracias a cursos que los
integrantes tomaron con el apoyo del gobierno de Francia, el gobierno Federal
de México y otras asociaciones altruistas.

“Para ser un top se necesita
ser altruista, tener un entrenamiento de un año, algunas personas no tienen
toda la capacidad física, pero nos pueden ayudar en otras funciones dentro del
grupo, no sólo en intervenciones”, añadió Álvarez.

“Fuimos convocados a las
16:00 horas cuando sucedió el evento en Pemex, nos avisó alguien del gobierno, el primer
personal llegó a las 17:00, la ayuda fue tratar de sacar gente viva. Nos
quedamos hasta las 3:00 am. Al día siguiente hubo una guardia en labores de
escombro para ubicar víctimas”, relató Fernando sobre las acciones emprendidas
el día del desastre.

No obstante, Álvarez
denunció a la prensa que Pemex,
Protección Civil y el Gobierno Federal no cuentan con la organización necesaria
para hacer funcionales las labores de rescate.

“En este nuevo hecho de
Pemex, quien tiene la experiencia de conciencia y apoyo social son estas
personas, desgraciadamente no se les da el reconocimiento por el valor que
representa. Por un lado, mientras se mantengan como personas que tienen una
conciencia social, es algo muy válido, que muchas veces cuando son incorporados
a programas esto se diluye porque se generan intereses o entran en dinámica
políticas”, abundó el doctor de la UNAM.

Álvarez mencionó al diario El Universal, que por falta de
coordinación ante el desastre se pierden vidas y nadie asumió la organización
de la emergencia.

Para Roberto Bermúdez, sí existe un vacío para asumir responsabilidades, y “las instituciones no tienen
la capacidad de confrontar catástrofes graves, la propia sociedad desarrolla
una especie de supervivencia: su participación”.

“Pretendemos seguir ayudando
en los desastres pero estamos tratando de crear un área que deje algo a la
sociedad en la forma de prevención. Damos clases, para evitar las muertes,
somos un grupo reactivo, es decir hasta que pasa el evento, pero ahora nos
dedicamos a la prevención”, comentó Álvarez.

Por
lo tanto, ¿cómo lograr medidas preventivas desde la sociedad y los gobiernos?

«Yo creo que sí debe tomarse
como urgente, existe el ejercicio de la UNAM, el Centro de Atención a los
Desastres; creo que a las autoridades les interesa más ganar las elecciones y
mantener el control de aspectos que generan recursos. En los hechos
debería de existir un grupo de protección, a nivel de exigencia constitucional»,
concluyó Bermúdez.