Por Víctor Gaspar
Distrito Federal, México, 30/05/12, (N22).- Una pareja de secuestradores, su víctima y un profesor, fueron los personajes que surgieron de la imaginación de Enrique Olmos de Ita para realizar la adaptacion escénica del Libro de Job a un contexto mexicano.
«Es la idea de revitalizar un mito que esta presente desde la antigua Mesopotamia y que ha transitado por los textos sagrados, que es el del hombre sufriente abandonado por dios, el mito de Job, traerlo a la modernidad», explicó Enrique de Olmos de Ita.
La confirmación de una sociedad atea, cuando transitamos desde el siglo XVIII hacia las consecuencias de saber que no hay ninguna divinidad.
La obra le dio a Olmos de Ita el Premio Nacional Manuel Herrera de Dramaturgia 2008 que ahora llega a escena bajo la direccion de Rodolfo Guillen.
«La violencia es la confirmación o una de las confirmaciones de una sociedad en la cual el hombre es presa del hombre», aseveró Olmos de Ita.
Con respecto al tratamiento del lenguaje, hay una experimentacion formal a partir de la palabra en escena y por eso es una obra tan dificil de montar y que necesitaba de un valiente como Rodolfo para poder encaminarla al escenario.
Olmos destaca la constante renovacion de los mitos religiosos en la realidad de nuestro pais y la posibilidad de diferentes niveles de lectura en su puesta en escena.
«La lectura primigenea creo que esta en la inmediatez de la espectacularizacion de la violencia que acontece en America Latina. Pero intuyo que de fondo, sobre todo la gente que haya tenido educacion religiosa o inquietudes teologales, apostara por una segunda lectura que me parece igual de valida que la primera y que ahondara mucho mas en esta reflexion sobre una especie de ateismo demostrado empiricamente», concluyó Enrique de Olmos de Ita.
Job se presenta todos los domingos a las 6 de la tarde en el Teatro La Capilla, Madrid 13, Coyoacán, Domingos 18 hrs. Desde el 3 de junio y hasta el 16 de septiembre
Imagen: http://bit.ly/LHsW5L
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