DISTRITO FEDERAL, México, (N22/Conaculta).-
Además de Mozart, Beethoven, Wagner y Tchaikovsky, existen autores clásicos que un instrumentista y un melómano no deben dejar de lado, como son Stravinski y Dvorák. Asimismo, compositores mexicanos como José Pablo Moncayo y Luis Pastor, tampoco deben quedar fuera del marco referencial de los músicos sinfónicos, ni de quienes son seguidores de este tipo de música.
De hecho para el público que empieza a interesarse en este quehacer artístico es primordial que conozca sus obras, por ello la Orquesta Sinfónica Juvenil Carlos Chávez (OSJCCH), ofrecerá en su Primera Temporada de Conciertos 2012 programas integrados con piezas de los autores antes mencionados.
El próximo fin de semana, el elenco B de la OSJCCH abrirá la reciente temporada con dos conciertos. El sábado 31 de marzo, a las 12:00 horas, en la Biblioteca Vasconcelos y el domingo 1 de abril, a las 17:00 horas en el Centro Cultural Fausto Vega, ubicado en la Delegación Iztapalapa, donde interpretarán Divertimento de: El beso del hada de I. Stravinski; Sinfonietta de José Pablo Moncayo y la Sinfonía Nº 9 OP. 95 en Mi menor de A. Dvorák, bajo la dirección del José Arturo González.
Serán dos presentaciones en las que el genio de Stravinski será evocado por los atrilistas, a través del Divertimento de: El beso del hada, cuya partitura está inspirada en el cuento La doncella de hielo de Hans Christian Andersen.
A decir del musicólogo Juan Arturo Brennan en 1934 Stravinski retomó la partitura de El beso del hada y realizó a partir de ella un Divertimento en cuatro escenas: 1) Una mujer carga a un niño en medio de la tormenta. El niño es raptado por unos espíritus y besado por un hada. Abandonado, es rescatado por una familia de campesinos. 2) Una danza campesina protagonizada por una joven mujer y su prometido. Ella se va. 3) El joven campesino es conducido por el hada hasta un molino, donde se encuentra a su prometida jugando y 4) Se ve a ambos jóvenes; ella se pone el velo nupcial.
“Si bien tanto el ballet en su forma original como el Divertimento son obras bien conocidas del catálogo de Stravinski, pocos saben que en el año de 1932 el compositor hizo otra versión de la obra, para violín y piano, con la colaboración del violinista Samuel Dushkin”, expresó Brennan.
Otro de los atractivos de este concierto es que el público tendrá la oportunidad de escuchar una obra de José Pablo Moncayo más allá de su famoso Huapango. La Sinfonietta estrenada en 1945 es una pieza menos folclórica que la primera, se desarrolla en tres movimientos ininterrumpidos (allegro-lento-allegro), donde el tercero es una reexposición del primero.
Sobre la Sinfonía Nº 9 OP. 95 en Mi menor de A. Dvorák, inspirada por la escena del funeral de Minnehaha en el poema épico Hiawatha (1855) de Henry Wadsworth Longfellow, Brennan dice que mucho se ha dicho y escrito sobre la autenticidad (o falta de ella) de los motivos, temas, armonías y ambientes sonoros americanos empleados por Dvorák en esta bella sinfonía.
“La única conclusión a la que se ha podido llegar sin demasiadas contradicciones es que, sea cual fuere el contenido “folklórico” de la sinfonía, el hecho es que la música misma es tan bohemia como la de cualquiera de las otras obras de Dvorák. El compositor creía en la identidad casi completa entre la música negra y la música indígena de los Estados Unidos”, subrayó.
Foto: http://bit.ly/Hu5idZ
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