Redacción/CDMX
El problema de ver el celular antes de ir a dormir no solo es que afecta a la vista, sino que tiene efectos negativos sobre la calidad del sueño.
La luz azul y el llamado “tecnoestrés”, que se presenta a causa de los algoritmos diseñados para ser atractivos en las redes sociales, son las que nos mantienen enganchados a las pantallas.
30 o 60 minutos viendo el teléfono antes de ir a dormir, son suficientes para alterar mi tiempo en que se concilia el sueño, confiesa Jessica Peoples, investigadora de Discriminación del estado de Nueva Jersey, Estado Unidos.
En pocas palabras, los teléfonos inteligentes restan las horas necesarias para tener una buena calidad de sueño, incluso si es una exposición muy pequeña, pues, cuando el cerebro procesa la luz eléctrica y la luz azul, suprime la producción de melatonina, retrasando el sueño profundo.
Y la falta de sueño, a su vez, puede desencadenar problemas negativos como obesidad y ansiedad, afirma Melissa Milanak, profesora asociada de la Universidad Médica de Carolina del Sur especializada en la Salud del Sueño.
Así que, si tu propósito es dormir mejor, Milanak sugiere algunas prácticas para descomprimirte del teléfono antes de ir a dormir: tomar un baño caliente, escuchar un podcast, preparar el almuerzo para el día siguiente, silenciar las notificaciones del teléfono o guardarlo en otra habitación.
(Con información de AP)