Redacción/CDMX
Hace 15 años, Vince Gilligan inició una serie que se ha convertido en legado de uno de los mejores dramas de la televisión. Basada en la figura del antihéroe.
Breaking Bad provenía de una fascinación que el autor tenía por el tema del bien y el mal, pero ni siquiera él podía atisbar los alcances de la historia.
Creo que la moral es una de las cosas más interesantes sobre las que escribir.
Como redactor de películas había tenido muy poco éxito, pero vi las comedias que escribieron a principios de los 90 y luego volví a mi trabajo en Los expedientes secretos X.
Creo que los episodios que más me interesaron y las películas que más me siguen interesando son los que indagan en la condición humana y en la idea del bien y el mal, en si vivimos en un universo en el que eso tiene sentido, explicó el guionista en conferencia virtual.
Aprendí todo lo que sé sobre escribir para la televisión de Los expedientes secretos X. Chris Cartes, el creador de la serie y mi jefe, me enseñó tanto.
Él, los otros escritores, los directores y los productores básicamente fueron mi escuela de cine y me pagaron por estar ahí. Mi buena fortuna en la industria empieza ahí, reconoció el guionista.
El éxito de Breaking Bad fue rotundo. La crítica y la audiencia aclamaron la historia del profesor de química que comienza elaborado metanfetamina para legar un patrimonio a su familia, tras enterarse de que padecen cáncer.
Y si bien Gilligan atribuye la buena acogida de la serie al trabajo de muchas personas, entre los que se cuentan escritores, fotógrafos, productores y actores; considera también que el trabajo de Brian Cranston tuvo un peso determinante.
“Creo que la mayor razón por la que Breaking Bad se volvió lo que es fue porque Brian Cranston, el actor que interpreta a Walter White, es la persona más perfecta en todo el mundo para hacer este papel. Hizo que este personaje reprobable –una mala persona– pudiera agradarle al público”. “Su habilidad para actuar, su carisma y su química con Aron Paul, quien hace un Jesse Pinkman, es un ingrediente secreto de la serie”.
De ser estrenada en estos tiempos cree que el destino de su serie hubiera sido muy distinto. “Mi corazón me dice que si Breaking Bad hubiera salido unos años antes, nadie la habría notado. Si se transmitiera ahora, en 2023, no estoy tan seguro. Creo realmente que todo tiene su momento perfecto, y lo triste de la creatividad y de hacer esto para vivir es que sé que hubo programas que nunca verán la luz del día, porque es difícil encontrar una audiencia”, detalló.
Luego de repetir el éxito con el spin-off Better Call Saul, Gilligan desea explorar nuevas alternativas en sus historias. “No es que no quiera volver a Breaking Bad, sino que tengo miedo porque no quiero meterme con los recuerdos de la gente”, agregó.
(Con información de La Jornada)