En México hay más de cien variedades de esta planta, con sus especies y subespecies
Redacción/CDMX
Su imponente belleza ha sido aprovechada de distintas maneras, muchas veces sin conocer a fondo sus grandes aportaciones, se ha demostrado que además de los árboles, el maguey es excelente al momento de capturar dióxido carbono.
No solo se obtienen de él fibras y deliciosas bebidas; cuenta con una capacidad increíble para contener corrientes de aire, mejorar la productividad de las tierras y alimentar los mantos freáticos.
El uso que se le ha dado ha sido meramente estético, sin conocer los beneficios que trae al medio ambiente.
Este ejemplar tiene la capacidad de absorber gran cantidad de CO2, a diferencia de otras plantas.
Sin contar los cuidados que no tienen complicación, no necesitan espacios grandes y sobreviven bastante bien con poca agua, se les puede regar hasta que se note su tierra seca, cada cinco días en temporada de calor y en invierno cada 15 días, lo único que requiere es bastante sol.
Colunga García, en un artículo titulado “El futuro de lo ancestral”, muestra que el tamaño de la planta madura de maguey y la gran cantidad de biomasa por sus propiedades fisiológicas la hacen más eficiente en el uso del agua, por lo tanto absorbe muy poca.
Señala también que el agave es una especie vegetal que puede hacer un aporte significativo a la captura de CO2 mediante el uso de combustibles fósiles que contribuyen al calentamiento global, además de ser una especie vegetal no competitiva por los recursos a diferencia de otro tipo de plantas.
(Con información de Milenio)