El desafío es aumentar el caudal a 4000 mil litros diarios
Paola Sánchez / Ciudad de México
Investigadores de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) desarrollaron una planta piloto para el tratamiento de agua con arsénico.
El dispositivo, de bajo costo, permite obtener hasta 1000 litros de agua purificada por día.
El prototipo fue probado con éxito en la ciudad bonaerense de Castelli y ahora se busca replicar la experiencia en otras localidades.
El desafío es aumentar el caudal a 4000 mil litros diarios. Los científicos fueron distinguidos recientemente con el “Premio a la Innovación de la UNLP”.
La iniciativa de desarrollar una purificadora de agua, surgió hace diez años en el Laboratorio de Ingeniería Sanitaria por cuenta de Fernando García Einschlag, docente en Ingeniería e investigador de la Facultad de Ciencias Exactas y del CONICET.
El experto que además dirige los estudios trabaja en la implementación de la técnica del Hierro Cero-Valente (ZVI) para la eliminación del arsénico (As) en agua.
El sistema fue puesto a prueba por primera vez, en colaboración con el IPAF región Pampeana perteneciente al INTA, en una vivienda familiar en la localidad de General Rodríguez.
En la última etapa, se realizaron nuevos ensayos en la ciudad de Castelli, enmarcados en un proyecto de extensión en colaboración con la Cooperativa de servicios de dicha localidad.
El prototipo denominado ALIAR (Agua Libre de Arsénico) consiste en una planta de tratamiento de tres etapas.
La misma opera de manera continua para obtener hasta 1000 litros de agua libre de arsénico por día. La ingeniera Cecilia Lucino, directora del proyecto de extensión, destacó que la técnica del Hierro Cero-Valente tiene como ventajas “su bajo costo, su mínimo impacto en el medio ambiente y su facilidad de implementación. Demanda una mínima cantidad de energía eléctrica para funcionar y el costo de los insumos requeridos rondan los dos centavos por litro de agua tratada”.
El dispositivo, basado en esta técnica, está construido con piezas de PVC estándares. Es sencillo y puede ser fácilmente instalado ocupando muy poco volumen.
Cuenta con aproximadamente un mes de autonomía, requiriendo durante este período una mínima supervisión por parte del usuario que no necesita ser personal calificado.
Las pruebas del prototipo se realizaron en el Departamento de Hidráulica (con agua contaminada artificialmente con arsénico) y en la localidad de Castelli (con agua natural de un pozo administrado por la cooperativa CUECCA).
De los análisis realizados se pudo determinar que 500 gramos de lana de acero (virulana) fueron suficientes para reducir el contenido de arsénico desde 130 ppb a un nivel por debajo de 10 ppb (actual límite de la Organización Mundial de la Salud y del Código Alimentario Argentino para el agua potable), operando con un caudal de 30 litros por hora durante 25 días en forma ininterrumpida.
El proyecto es llevado adelante en el Departamento de Hidráulica con el apoyo de la Unidad de Investigación, Desarrollo, Extensión y Transferencia (UIDET) Hidromecánica de Ingeniería.
También, participan docentes, técnicos y becarios de dicha unidad académica y docentes de Ciencias Exactas.