Tras su primera intervención en la ronda final por equipos, la atleta abandonó la competencia anteponiendo su bienestar mental
Redacción / Ciudad de México
«A veces pienso que tengo que tengo el peso el mundo sobre mis espaldas. Sé que me lo quito de encima y hago que parezca que la presión no me afecta, pero es condenadamente difícil. Los Juegos Olímpicos no son una broma», escribió Simone Biles en su cuenta de Instagram tras abandonar la final por equipos luego de su primera intervención en la ronda final por la medalla de oro.
La atleta declaró a los medios presentes en la competencia: «después de la actuación que hice, simplemente no quería seguir. Tengo que concentrarme en mi salud mental. Simplemente creo que la salud mental ha tomado más relevancia en los deportes en este momento».
Y es que la gimnasta nacida en Ohio (1997), ganadora de cuatro medallas de oro en los Juegos Olímpicos de Río, en 2016, y considerada la mejor gimnasta de la historia, señaló a la BBC: «Tenemos que proteger nuestras mentes y nuestros cuerpos, y no solo salir y hacer lo que el mundo quiere que hagamos […] Ya no confío tanto en mí misma. Quizás esté envejeciendo. Hubo un par de días en que todo el mundo te tuitea y sientes el peso del mundo […] Son los Juegos Olímpicos, pero al final del día no queremos que nos saquen de allí en una camilla».
Biles permaneció en el coliseo Ariake apoyando a sus compañeras que quedaron segundas en la final, llevándose el oro el Comité Olímpico Ruso y Gran Bretaña el bronce.
La gimnasta que en 2012 entrenaba 32 horas a la semana y ganó su primer título mundial en 2013, aún no descarta su participación en las competencias individuales del próximo jueves. Sin embargo, declaró: «lo tomaremos día a día y veremos qué sucede».
Imagen de portada: © Loic Venance / AFP