El embajador de México ante la ONU destaca por su apoyo a migrantes y promover la igualdad y la protección a los derechos humanos
Karen Rivera / Ciudad de México
Por la promoción y defensa de los derechos humanos de los migrantes como representante permanente de México ante la Organización de las Naciones Unidas, Juan Ramón de la Fuente recibió la Medalla al Mérito Internacional 2020, que otorga el Congreso de la Ciudad de México. Reconocimiento que, asegura, comparte con el equipo de la misión en Nueva York.
En este contexto, ¿cuáles son los principales retos a resolver en materia de migración que encuentra el embajador mexicano?
«Cuál es el problema de fondo desde el punto de vista legal, cada país es soberano y tiene todo el derecho de establecer sus propias leyes migratorias, a veces las de un país y el país vecino no coinciden, entonces ahí empezamos por tener un conflicto de orden jurídico, lo que es legal en un país no es legal en el país de junto, entonces qué prevalece. Ahí es donde entra el derecho internacional y tiene opciones y para eso se requieren los pactos y los acuerdos. Entonces hay un problema jurídico de fondo que no está resuelto», explicó en entrevista, el Embajador Representante Permanente de México ante la ONU, Juan Ramón de la Fuente.
«Después está el problema político, el gran problema político, por un lado, nadie en su sano juicio puede estar en contra del derecho a la migración que tienen aquellos que salen de un lugar, porque se sienten inseguros o porque están perseguidos o porque no tienen qué comer. El problema es que cuando se vienen estos movimientos migratorios aparecen digamos los chicos malos del asunto, es decir los que trafican con personas, los polleros, los que aprovechan el éxodo de estas personas que vienen literalmente huyendo, para traficar con cualquier otro tipo de mercancía o de niños», continuó.
Para el representante nacional, lo primero que debe atenderse son las causas estructurales de la migración, aquellas que llevan a la gente a salir desesperadamente de los lugares que habitan.
«Yo, creo que el caso de Centroamérica, México y Estados Unidos, es un conjunto en donde el tema de la migración puede encontrar una solución, el plan de desarrollo integral que propuso México es un buen modelo del trabajo multilateral, el Secretario General de la ONU se ha referido a él justamente en estos términos, como un modelo que puede funcionar, que nos puede mostrar que podemos llegar a un acuerdo que nos permita ordenar estos flujos migratorios de manera transitoria mientras se atienden las causas de fondo que son siempre estructurales, que requieren recursos, que requieren inversión y que requieren voluntad política».
¿Cómo construir un sistema migratorio regional que privilegie la movilidad humana segura?
«El fenómeno es multidimensional, cualquier intento por simplificarlo me parece que no nos ayuda, porque no va a ir por ahí la solución. Ahora sí se necesita tener la concepción integral. Los planteamientos en nuestra región que se han hecho creo que apuntan en la dirección correcta. ¿Qué ha faltado?, faltan dos cosas, también hay que decirlo, un mayor compromiso de los países, compromiso político», mencionó.
«En este momento el principal problema para empezar a trabajar en una migración segura tendría que contar con la posibilidad de vacunar a todos los migrantes y a toda la población en general de Centroamérica, se volvió no solamente un problema, sino una necesidad y una demanda social. Simplemente lo comento, porque también ha sido un tema del que nos hemos ocupado con ciertos avances y también con una cierta dosis de frustración cuando vemos que, a pesar de que pensamos que los argumentos que se esgrimen son ciertos, son válidos y se votan a favor, logramos ganar las votaciones, después esto no se traduce en hechos», concluyó Juan Ramón de la Fuente.