¿Cómo ha afectado la pandemia la donación de órganos en México, un país que en este rubro tiene una de las tasas más bajas de donadores por millón de habitantes?
Ireli Vázquez / Ciudad de México
En la actualidad hay miles de personas que para seguir viviendo o mejorar su calidad de vida necesitan de un trasplante. La única forma de contribuir como sociedad a resolver este problema es donar; cuantas más personas acepten ser donadoras, mayor será el número de vidas que se podrán salvar.
Existen dos tipos de donaciones: la que se da en vida, y otra que sucede cuando una persona fallece. La Ley General de Salud en México establece que todos somos donantes, a menos que expresemos lo contrario, por lo que es necesario consultar con el familiar esta decisión.
Erika Rivera, Jefa de Área de Donación de la Coordinación de Donación y Trasplantes del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), explica que «la donación en vida es cuando un familiar requiere un riñón, probablemente después de que me hagan varios estudios puede ser compatible con él […] y los donantes fallecidos, que es como la mayor parte de la gente sabe que pueden donar. Aquí sí es importante saber que la decisión la va a tomar al final la familia».
Sin embargo, es imponte mencionar que, para que una persona pueda ser donadora, debe de contar una vida saludable, «no todos al final vamos a ser donantes, se tiene que tener realmente una vida saludable, no infectarnos con algunas enfermedades que pueden transmitirse al receptor, como la hepatitis, VIH, sífilis. Y también se tiene que morir de ciertas enfermedades, por ejemplo, una persona que fallece en un accidente automovilístico, y que no tiene infecciones previas puede donar todos los órganos o tejidos; sin embargo, si la persona cae en parada cardiaca, pues solamente puede donar tejidos».
El Centro Nacional de Trasplantes reporta que, si bien la cultura de la donación de órganos ha mejorado en los últimos años en México, aún existe una gran demanda de órganos, células y tejidos que asciende a las 21 mil 500 personas en lista de espera, de las cuales el 67% están en espera de un riñón, el órgano con mayor demanda, al que le siguen las córneas, con aproximadamente 7 mil 200 personas en espera.
«Nuestro país tiene una de las tasas más pequeñas en Latinoamérica, por cada millón de habitante debe de haber una proporción de donantes, y el país que siempre ha sido un ejemplo a nivel internacional, es España, que tiene una tasa de 49 donantes por millón de habitantes, y bueno, realmente México alcanza el 4.3 el 4.1, es demasiado bajo», comentó Erika Rivera.
¿A qué se debe que México sea uno de los países con la tasa de donación más baja?, Rivera menciona que esto más que cultural, es por cuestiones de desinformación, puesto que «se desconoce acerca del proceso de donación; muchas familias nos cuestionan sobre cómo les estregaremos a sus familiares, si los podrán cremar o enterrar, o si al momento de quitar los órganos quedaran irreconocibles, y algo que me gustaría aclarar es que en ningún momento se lastimará la integridad de la persona. Muchas veces por esa desinformación, ese miedo, no queremos donar.»
Los números no son favorables en nuestro país, debido a diversos factores, como lo son los sociales y de salud, pues de acuerdo con datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), México es el país de América Latina que tiene la mayor tasa de sobrepeso y obesidad entre su población, lo cual ha desencadenado otros padecimientos, como la hipertensión y la diabetes.
«Nos estamos quedando sin donantes, precisamente porque la mayor parte de nuestra población ya es obesa, entonces ya es hipertensa o diabética. Eso quiere decir que vamos perdiendo órganos», comentó.
Covid-19: el alto a las donaciones y trasplantes
Rivera explica que la pandemia provocada por la covid-19 vino a complicar más la situación, pues los protocolos tuvieron que modificarse.
«Es importante saber que muchas cosas del virus aún no las conocemos. Los pacientes que definitivamente tienen covid, y que están en aislamiento por covid, no pueden ser donantes. En el caso de una persona que le haya dado covid, tenemos que esperar 21 días, y hacerle una prueba PCR y veo, si la prueba es positiva no donaría, si la prueba es negativa, pues se valoraría. Ahora si yo tengo un donante que como que tenía síntomas, que era muy ambiguo, pues tomo una tomografía de tórax y tomo una muestra de PCR y dependiendo de las dos, valoro si ese paciente puede ser donante.
»La seguridad que se debe de tener de la sangre, de los órganos y de los tejidos es vital, ya sabemos que necesitamos muchas, pero tampoco podemos arriesgar a que no hagamos las pruebas necesarias para brindar una seguridad a quien lo va a recibir», concluyó.
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), reportó que, hasta septiembre de 2020, y a pesar de la emergencia sanitaria y la suspensión temporal de los programas de donación y trasplante, se realizaron 62 donaciones multiorgánicas y 215 de tejidos, con lo que se realizaron 349 trasplantes de riñón y 14 de hígado de donador vivo y cadavérico; 322 de córnea, tres de corazón y 87 de Células Progenitoras Hematopoyéticas. Sin embargo, aún falta mucho por hacer.